Si algo han sido las protestas contra la dictadura comunista de Cuba, es piedra de toque. Han tenido la cualidad de radiografiar a los actores políticos del mundo y exhibir quiénes son los amigos del régimen castrista.
Más pronto que tarde, Black Lives Matter, la agrupación que finge interés por la población de raza negra, pero en realidad es una guerrilla urbana que busca implantar el comunismo en Estados Unidos, no tardó en salir a defender a la dictadura cubana, como que son del mismo equipo.
BLM culpa de la situación cubana al embargo estadounidense, afirmando: “Esta política cruel e inhumana, aplicada con la intención explícita de desestabilizar el país y socavar el derecho de los cubanos a elegir su propio gobierno, está en el centro de la crisis actual de Cuba”.
Se pasan los ‘camaradas’ de BLM, que parecen olvidar un pequeño e insignificante “detalle”: el embargo está ahí porque la dictadura comunista cubana se niega a hacer elecciones libres. Es decir, son ellos quienes han socavado el derecho de los cubanos a elegir su propio gobierno y no Estados Unidos
¿BLM quiere que se acabe el embargo? Tan fácil. Que mañana Raúl Castro y su títere, Miguel Díaz Canel, convoquen a elecciones libres en Cuba. No lo harán, porque ellos y otros tantos de la nomenklatura cubana, han vivido muy bien, con gran holgura, por décadas, bajo ese régimen, mientras su pueblo tiene una vida infrahumana, con dolor, hambre e innumerables carencias...
Por supuesto, BLM omite hablar ya no digamos de la represión a periodistas y blogueros, o sobre esa purga que se ha desatado tras las protestas del 11 de julio, con 537 detenciones hasta de adolescentes, sino que ni siquiera refiere a la muerte de Diubis Laurencio Tejeda, de 36 años, asesinado durante la represión, o al posterior suicidio de su madre, debido al dolor que le causó su pérdida. Diubis era un hombre de raza negra, pero es que a Black Lives Matter le importan las vidas negras, pero no tanto como el dinero, que ha permitido, entre otros “logros”, que su fundadora, Patrisse Cullors, se haya comprado cuatro mansiones en Estados Unidos, con un precio de 3.2 millones de dólares.
Por lo demás, BLM no tiene mucha razón de queja con el actual gobierno estadounidense, indudable cómplice suyo y del régimen cubano. La administración demócrata ya advirtió que ningún cubano que huya de la dictadura entrará en su territorio. Y anunció, con lujo de ironía y cinismo, que impondría "duras sanciones" a Cuba... y terminaron siendo puniciones para algunos de los altos cargos de la dictadura, en el sistema financiero estadounidense, lo que les importa cero, porque el dinero del comunismo es, per se, sucio. Y si necesitan ir al cajero automático, China y Venezuela les prestan los que hagan falta...
Sin embargo, esos no han sido méritos suficientes para que BLM le ponga su estrellita en la frente a Joe Biden. Roja, por supuesto.
CAMILA, OTRA VEZ PRESA: A la periodista cubana Camila Acosta, corresponsal del diario español ABC, la volvieron a detener ayer lunes.
La dictadura enfureció porque Camila escribió la excelsa crónica "Cuatro días en las cárceles cubanas", para ABC, que relata, en primera persona, su detención inicial (https://www.abc.es/internacional/abci-cuatro-dias-carceles-cubanas-202107250125_noticia.html).
Horas más tarde fue liberada y escribió el siguiente tuit: "Hoy fui arrestada por la Seg. del Estado #Cuba.Están presionando a la familia de Fabio Corchado,amigo q me ha dado techo después de ser desalojada y, para ello, tienen preso a su hermano, Víctor M Glez; quieren que ellos me echen de la casa. Continuo en reclusión domiciliaria" (https://twitter.com/CamilaAcostaCu/status/1419882865823674372).
Así se las gasta la dictadura cubana, mientras Biden le da con la puntita del rebozo a sus líderes...
PERIODISMO FACCIOSO: La numerosa marcha que el exilio cubano llevó a cabo en Washington, el sábado 17 pasado, no mereció ninguna mención en las portadas del Washington Post -el periódico de Jeff Bezos- ni el New York Times. Si eso no es hacer periodismo faccioso, entonces ¿qué es?...
DEJEN VIVIR A LA DICTADURA: Pero lo que sí publicó el New York Times, por supuesto, es la carta titulada "Let Cuba Live" ("Dejen vivir a Cuba"), firmada por una sarta de comunistas, particularmente latinoamericanos, en la cual destacan los ex presidentes 'Lula' y Rafael Correa. También los actores hollywoodenses Mark Ruffalo, Susan Sarandon, Emma Thompson y Jane Fonda, quienes, desde sus lujosas mansiones, piden que, por favor, dejen en paz a la dictadura cubana, que le permitan hacer y deshacer, reprimir y torturar. Por supuesto, Ruffalo, Thompson, Sarandon y Fonda, jamás dejarían sus comodidades para irse a vivir a Cuba y pasar la vida infrahumana que su gente sufre, por culpa de la dictadura. Arriba el comunismo, pero no en Malibú, of course...
Y claro, sobre las detenciones, la represión y la falta de democracia en Cuba, esas "personalidades" no dicen ni media palabra, ni le piden nada a la dictadura. No se les vaya a enojar.
Por cierto, Black Lives Matter también firmó el manifiesto...
P.D.: Si algo nos pasa, es que buscan callarnos
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