Entró en vigor el segundo aumento al salario mínimo en la administración de Andrés Manuel López Obrador de 20% que es mucho más alto que la inflación del año pasado, dato que el INEGI de Julio Santaella dará a conocer mañana y que los pronósticos coinciden en que estaría debajo de 3%, y de mantenerse la tendencia de aumentos adicionales de doble digito en los siguientes años habrá implicaciones en los niveles de rentabilidad de diversas emisoras mexicanas antes de tomar medidas que permitan mitigar el rápido incremento de la mano de obra. Y justo este es el planteamiento del área de análisis de Credit Suisse para cuantificar las repercusiones del incremento salarial en el universo de empresas de consumo y comercio minorista.
Así las compañías más afectadas serían Alsea que preside Alberto Torrado con un aumento en los costos laborales de 90 millones de pesos sólo este año considerando que entre 40 y 45% de la fuerza laboral de México recibirá un mayor salario, y en consecuencia presionaría sus márgenes de operación que podrían incluso disminuir este año. Además, Liverpool de Max David absorbería un cargo por 230 millones de pesos considerando que con el primer aumento de 16% que se aplicó en 2019 el impacto en costos fue de 200 millones de pesos en una base anual que afectó negativamente el margen Ebitda de la cadena de tiendas departamentales, los mismos que padecerían todavía más con un incremento salarial mayor.
En contraparte Walmart México y Centroamérica que encabeza Guilherme Loureiro, Chedraui de José Antonio Chedraui e incluso Femsa, específicamente por la división de Comercio a cargo Daniel Alberto Rodríguez, en el corto plazo el impacto no sería relevante porque la gran mayoría de su personal ya percibe más del nuevo salario mínimo actualizado, pero en el mediano plazo tendrían que lidiar con el tema ante la tendencia ascendente del salario con tasas de por lo menos 15% en los siguientes años. Aumento de precios, mayores innovaciones tecnológicas en sus procesos para disminuir la mano de obra, reducción de inversión en mercadotecnia y la eventual racionalización de la fuerza laboral, son algunas de las medidas que según Credit Suisse podrían mitigar el incremento del salario mínimo.
¿Y el combate a la corrupción?
En el ISSSTE que encabeza Luis Antonio Ramírez Pineda la opacidad sigue creciendo. Resulta que se denunció que la jefa de Adquisiciones, María Dolores Carranza y el jefe de Departamento de Contratación de Servicios Generales, Raúl Marmolejo son pieza clave para beneficiar a ciertos proveedores e incluso pasar por alto el incumpliemiento de las caracteristicas de los materiales solicitados. Sólo una muestra es el contrato por más de 385 millones de pesos para servicios de limpieza a Grupo Relissa Servicios Corporativos en medio de sendas irregularidades en trámites y procesos.
@robertoah
