San Diego.- Adaptarse o morir. Los Padres de San Diego regresarán a los entrenamientos a partir de julio y trabajar bajo condiciones especiales para una reducida temporada de Grandes Ligas que al fin arrancará el 24 de julio.
El manejador norteamericano, Jayce Tingler, aseguró que, a pesar de que la fase de clasificación se redujo significativamente a solo 60 juegos, los Frailes no pierden el objetivo de la vista. Derrumba las excusas asumiendo el reto de regresar a los juegos de Playoffs esta campaña.
“No ha cambiado nada de nuestra expectativa”, aseguró. “Nos estamos preparando para estar en los juegos de Playoffs, hacer daño y competir. Este año será diferente, sin duda alguna. Las reglas están puestas, son las mismas para todos los equipos y estamos listos para competir”, añadió.
La temporada debió arrancar el pasado 26 de marzo. En teoría, los peloteros deberían estar en pleno ritmo ya a la mitad del calendario. Sin embargo, la industria del béisbol, y el deporte en general, se tuvo que detener.
Tingler señaló que el principal reto para el staff de entrenadores será poner a los peloteros en forma en espacio de tres semanas. Además que al ser un calendario reducido, será indispensable la capacidad que cada equipo desarrolle para no caer en malas rachas por tiempo prolongado.
“Todos los peloteros están acostumbrados a jugar a esta altura del año. La preparación para la temporada se detuvo algunos meses y nuestra mayor preocupación y mayor reto será poner a nuestros chicos listos para jugar en tres semanas, teniendo en cuenta nuestra realidad. Un ‘mal paso’ o un esfuerzo exigente puede significar estar fuera de seis a ocho semanas por lesión y se pueden perder la mayoría de la temporada o toda. Hay que balancear el esfuerzo con el ritmo. Yo creo que esa será nuestro mayor reto”, indicó.
Los trabajos de preparación arrancan a partir del primero de julio. Reveló Jayce que los beisbolistas que regresarán serán seguramente los lanzadores y receptores de Padres. Posteriormente se irán integrando, de forma gradual, a los trabajos pre competitivos los demás jugadores.
La ausencia de aficionados, al menos en el arranque de la temporada, es inevitable, no obstante, es en esta clase de momentos donde luce el ingenio de las franquicias.
En la liga de Corea del Sur, los equipos llenaros sus estadios con muñecos de peluche o fotografías de aficionados para simular gente en las gradas. En este mismo tono, el manejador de Los Padres, comentó que han tenido pláticas en la organización para replicar estas técnicas y motivar a los jugadores.
“Nuestro objetivo es replicar un ambiente lo más similar posible al del estadio con gente para generar una atmósfera positiva”, afirmó Tingler.
“En el pasado más del 90 por ciento de la energía venia de los aficionados, así que tenemos que buscar la manera de hacer eso, en especial con una temporada de 60 partidos. No podemos permitirnos decaer nuestro nivel por mucho tiempo”, concluyó.