¡El dinero sí compra la felicidad!

Jurgen Klaric comparte cuál es el propósito de su vida y para qué sirve el éxito y el dinero

  · domingo 12 de mayo de 2019

Tijuana.- Sobre su imagen, Jürgen Klaric señaló: “La verdad, yo me veo como un loquito que trata de cambiar al mundo; como un loquito muy feliz, porque lo que pienso, siento, digo y hago va en contravía del modelo de pensamiento tradicional, especialmente el empresarial. Yo un día descubrí que no quería ser falso. Me sentía mal con el doble discurso, la doble moral, los dobles intereses. Eso me pasaba cuando trabajaba en el marketing de marcas incoherentes. Me sentí cómplice del mercantilismo. Me dije: ‘voy a ser quien soy yo y tengo que ser congruente en todos los aspectos’. Me reinventé. Hoy yo soy yo. Visto como quiero, pienso como quiero, digo lo que quiero. Creo poder decir que soy muy auténtico, muy diferente. Hoy valoro la autenticidad y la sencillez”.

UN CAMBIO QUE LLEGA A SU VIDA

“Pienso que tuvo que ver con la autoestima. Yo siempre buscaba el reconocimiento hasta que me di cuenta de que la gente me aplaudía demasiado. Ya ni tenía que demostrarle nada a nadie, y me dije: ‘ahora voy a ser yo’. Cuando hice este cambio, me empecé a sentir muy bien. Entonces, también sentí que podía vivir cada vez de manera más sencilla. Cada vez me gustaban menos los Rolex, los carros, las mansiones, lo que antes representaban mis sueños. Logré esta libertad, que fue el producto de creer en mi al ciento por ciento”.

“CONÉCTATE CON EL DINERO”

El dinero es el objeto que está más cargado de fuerza energética. No hay nada físico que te pueda dar más energía que el dinero, porque el dinero te da la posibilidad de ahorrar energía, te da posibilidad de desgastarte menos, y te da la posibilidad de tener más poder. Pero tiene que ser más poder para cambiar al mundo y no para manipular, comprar carros, intimidar o dominar. El dinero nos da el poder de cambiar el mundo, para amar, para ser felices.

El dinero es un potencializador. Si tú eres una mala persona y yo te doy mucho dinero, te vuelves aún más mala. Si tú eres bueno y te dan mucho dinero, te vuelves más bueno. El dinero no cambia a la gente, simplemente potencializa quien eres.