Crisstian Villicaña
Tijuana.- Cuando una ciudad como Tijuana pasa por distintas actos de violencia diariamente, la necesidad de espiritualidad se acrecienta en la sociedad como una especie de arma para contrarrestarla, según plática el arzobispo de la localidad, Francisco Moreno Barrón.
“Vivimos en medio de una sociedad marcada por expresiones de muerte, como puede ser la violencia, como pueden ser los asaltos, las muertes; todas estas expresiones de violencia hacen más fuerte la necesidad de Dios, y, aunque la gente experimenta con dolor todas estas expresiones de muerte, también expresa la necesidad de poner su mirada en Dios”, apuntó.
En distintas ocasiones, el arzobispo ha enunciado que es necesario reforzar la fe en las personas para que, con ello, se logre espiritualizar la manera de pensar y sentir sobre los demás.
Así mismo, a la par de la sociedad, la iglesia juega un rol de suma importancia en este camino hacia una ciudad de paz. "El papel de la iglesia es un factor de esperanza, de vida nueva; desde luego que es verdad que hay gente que ha dejado de practicar su fe devocionalmente. Sin embargo, también hay mucha gente que ahora vive a mayor a profundidad, a mayor conciencia su fe".
"En el fondo, lo importante es que Dios no esté ausente en su vida; esa es la labor de la iglesia, como hacerle para que Dios reine en la vida de las personas, en la vida de las familias, en la vida de la comunidad y se encuentren los caminos del verdadero progreso", concluyó Moreno Barrón.