Garfio, el caimán de siete años que vive en el parque Morelos, está estrenando hábitat desde este viernes.
Se trata de un espacio adecuado para su desarrollo y crecimiento, indicó Alejandro de Jesús Román Salazar, coordinador técnico del Sistema Municipal de Parques Temáticos de Tijuana (Simpatt).
“Cumple con las medidas necesarias para cuando ya sea un adulto con su tamaño final (...) Garfio se encontraba en otra área que conocemos como la granja, tenía un espacio determinado para su tamaño, afortunadamente con los buenos cuidados que le hemos dado aquí dio un buen estirón”, contó.
Garfio mide aproximadamente dos metros, pero su tamaño final podría ser de cuatro a cuatro metros y medio, de acuerdo con Román Salazar.
“Está con nosotros desde que era chiquito, tiene 6 años y medio en la Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA), nos da mucho gusto y orgullo el poder darle un hábitat digno”, agregó.
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Javier Inzunza, encargado de despacho del Simpatt, mencionó que la inversión para el nuevo espacio fue de 110 mil pesos.
“No estamos tomando en cuenta la mano de obra porque se hizo con personal del Simpatt”, dijo.
De acuerdo con Simpatt, los caimanes como Garfio viven en ríos, pantanos, estanques, humedales, arroyos y lagunas al sur de EU, desde Carolina del Norte hasta el sur de Texas.
También han sido observados en algunas partes del Río Bravo en México.
“La persecución humana de que fue objeto en otro tiempo lo ha hecho desaparecer de muchas zonas, y actualmente sólo abunda realmente en el estado de Florida”, detalló el Simpatt.
Su coordinador técnico fue cuestionado sobre las diferentes condiciones en las que viven los caimanes en su hábitat natural y las que se encuentran en una ciudad como Tijuana, a lo que respondió que esos animales tienen la capacidad de adaptarse.
“Tienen un periodo que se conoce como pseudo hibernación, que se llama torpor, lo que hace es disminuir su metabolismo. Requieren menos nutrientes y menos energía para sobrevivir la temporada fría”, detalló.
Román Salazar mencionó que un caimán en cautiverio como Garfio puede vivir de 110 a 120 años, mientras que en vida libre alcanzan de 75 a 85 años de edad.
“En cautiverio como tienen más cuidados, atención veterinaria, agua climatizada y un lugar para pasar la temporada fría, el periodo de vida se prolonga (...) hay cocodrilos y caimanes en la zona de Australia de 130 años”, añadió.
Para finalizar, el coordinador técnico del Simpatt mencionó que los caimanes como Garfio son alimentados con entre 7 y 10 kilos de pollo con hueso, carne de res y de puerco.
“Su periodo de alimentación varía de acuerdo a la temporada. En la temporada fría de septiembre a marzo se alimenta una vez cada quince días o una vez al mes. En la temporada cálida se le alimenta tres veces a la semana”, concluyó.