Uriel Saucedo
Tijuana.- Entre 600 y 700 llanteras trabajan de forma informal en todo el estado, lo que está trayendo consigo que existan cada vez más tiraderos clandestinos de llantas, informó el presidente de la unión de llanteros, Juan Antonio Balderas.
Recordó que en Tijuana, desde hace unos años, se cerró el centro de acopio de llantas, ya que se había saturado y el Gobierno del Estado ya no le encontró una solución; por tal motivo, mencionó que en estos momentos no están tirando las llantas en la ciudad, sino que van hacia otros municipios.
Mencionó que, junto con Canaco, se está pidiendo al gobernador de Baja California poder obtener los permisos de dicho centro de acopio, ubicado sobre el bulevar 2000, para trabajar en el predio, triturar la llanta que ahí se encuentra y evitar cualquier tipo de contaminación.
“La unión de llanteros quiere buscar que se le otorgue ese terreno para buscar la forma de cómo separar el hule, el acero, el nailon, hacer la separación y buscarle un destino final”, afirmó el presidente de la unión.
Informó que al año se desechan cerca de más de un millón de llantas porque, regularmente, están importando 800 mil llantas en todo el estado, pero calculan que hay cerca de tres millones de llantas de basura, por las llantas de contrabando o las nuevas que no están reguladas y se tiran en lugares clandestinos.
Por su parte, el jefe de la dirección de Bomberos, José Luís Jiménez, informó que la problemática de los tiraderos clandestinos de llantas ha ido en aumento, ya que se ha observado en los servicios que atienden en terrenos baldíos la presencia de llantas, sobre todo en la periferia de la ciudad, en zonas cercanas al bulevar 2000 y diversos cañones.
Así que invitó a las llanteras que no estén regularizadas, que se acerquen a la dirección de bomberos y el ayuntamiento para que se informen acerca de cómo pueden estar regularizados y capacitados y así evitar algún incidente en el futuro.
En todo el estado, hay cerca de tres millones de llantas en la basura
