Un brote de Covid-19 en la escuela donde estudia su hijo de cinco años, alertó a Ximena Rocha sobre la necesidad de que el menor sea vacunado contra el virus.
Debido a que en México aún no está aprobado el biológico para ese rango de edad, la alternativa para la mujer fue cruzar la frontera, en donde desde hace semanas la autoridad avaló la vacunación para mayores de cinco años.
Según relata, no requirió que el menor fuera ciudadano americano, únicamente tuvo que agendar una cita, en la cadena Lyons Pharmacy, que cuenta con sucursales en varias partes del Condado de San Diego.
“Fue muy fácil, entré a la liga que me mandaron y pude agendar la cita sin ningún problema. Fue muy ágil el proceso”, agregó.
Luego de la apertura de la frontera a cruces no esenciales, es más común conocer de tijuanenses que van a San Diego a aplicarse el biológico, ya sea porque aún no está aprobada para su rango de edad en México o aún no califican para un refuerzo.
“Yo fui a vacunarme nada más abrieron la frontera, aún no llegaba la vacuna aquí para los de mi edad y supe que no pedían muchos requisitos”, comentó Máximo, un joven de 17 años.
Otros que aprovecharon para inocularse en el vecino país, fueron los profesores, que en su mayoría habían recibido el biológico de Cansino, el cual no ha sido aprobado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Dije que me iba a ir a vacunar allá y me dejaron pasar, me comentaron compañeros que no había ningún problema por estar con Cansino y aproveché la oportunidad”, dijo Itzel Ramírez, profesora de secundaria.
