El gobierno federal aún no cuenta con un plan para recibir a migrantes deportados bajo la orden ejecutiva del presidente Joe Biden, indicó Jesús Alejandro Ruiz Uribe, delegado federal en Baja California.
“No, porque no tenemos el problema todavía. Se están adelantando a una hipótesis, pero no estamos sufriendo ese problema”, añadió.
El funcionario federal mencionó que no ha habido un incremento de migrantes deportados a la frontera mexicana desde la entrada en vigor de la orden ejecutiva, hace dos semanas.
“No estamos sufriendo en este momento ningún pico como lo sufrimos en otros momentos (...) Seremos precavidos en el tema, si el gobierno federal tuviera necesidad de abrir otro centro lo abrimos”, explicó.
La nueva medida migratoria consiste en la deportación inmediata de las personas en contexto de movilidad que cruzan la frontera de manera irregular.
Según la orden ejecutiva, las deportaciones inmediatas terminarán cuando el número de cruces ilegales sea menor a mil 500 diarios
Enrique Lucero Vázquez, titular de la Dirección Municipal de Atención al Migrante (DMAM), mencionó el 10 de junio que antes de la orden ejecutiva el número de deportados que ingresaban por la frontera de Tijuana era de 250 mexicanos por día.
“En las últimas semanas ha disminuido drásticamente, el Instituto Nacional de Migración (INM) nos menciona que han sido entre 60 o 100. Con esta orden política del presidente Biden va a depender mucho de cómo se salten las personas, ese va a ser el número de retornos”, dijo.
Lucero Vázquez añadió que si la orden ejecutiva se extiende el número de deportados podría incrementar un 30%.
José María García Lara, director y fundador del albergue Juventud 2000, dijo el 7 de junio que las autoridades mexicanas deben tener una estrategia ante ese posible incremento.
“Que no estén esperando a ver qué sucede, deben tener algo planeado (...) Pero sin recursos económicos ¿Cómo enfrentar esta situación tan compleja?”, dijo.
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Sobre la falta de apoyos económicos por parte de autoridades federales a asociaciones civiles, Ruiz Uribe respondió que el gobierno federal continúa apoyándolas con despensas, cobijas y catres.
“Lo que se quitó fue el dinero en efectivo. En los gobiernos anteriores se les daba a los albergues dinero por migrante, nosotros cambiamos eso”, finalizó.