Daniel Ángel Rubio
Tijuana.- La construcción de la desaladora en la ciudad de Playas de Rosarito está detenida por tiempo indefinido, confirmó Alfonso Padrés Pesqueira, secretario de Infraestructura y Desarrollo Urbano de Baja California.
Esto es producto de un conflicto interno de la empresa que ganó la licitación, donde empresarios salieron del grupo de inversión, explicó.
“Presentó un procedimiento legal, se está llevando, y el juez nos acaba de indicar que se quede todo ahorita en espera”, apuntó.
Esto detiene la obra, pero la empresa puede seguir realizando los trámites necesarios para poner en marcha la desaladora, agregó.
“La empresa tiene un tiempo determinado para terminar los estudios. Ese es el que se va a ver afectado”, apuntó.
Todo el proceso que incluye estudios y ejecución de obra está proyectado para tardar tres años, continuó el secretario de Desarrollo Urbano del Estado.
El compromiso del grupo empresarial contratado por el estado, bajo la figura de Asociación Público Privada (APP), apuntó, es vender metros cúbicos de agua desalada a Tijuana, Ensenada o San Quintín.
“Ese es el compromiso que el estado tiene a través de las comisiones estatales de servicios públicos. Lo demás es totalmente responsabilidad de la empresa, y la empresa lo tiene que resolver”, indicó Padrés Pesqueira.
La desaladora en el quinto municipio está envuelta en polémica desde su presentación por el Gobierno del Estado.
Además del grupo Mexicali Resiste, que acusa irregularidades en la llegada de la compañía, hay una acción de inconstitucionalidad presentada por diputados del estado.
“El juez nos acaba de indicar que se quede todo ahorita en espera”
Alfonso Padrés Pesqueira, titular de la SIDUE
