Tijuana.- A nueve días de que iniciara el programa de racionamiento de agua potable de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), las colonias ubicadas en lomas y cerros, continúan como las perjudicadas por la falta del vital líquido.
De acuerdo al investigador del Departamento de Estudios Urbanos del Colegio de la Frontera Norte (El Colef), Alfonso Cortez Lara, colonias como El Jibarito, Lázaro Cárdenas y Maclovio Rojas, siguen siendo las que reportan más escasez de agua, pese al programa implementado por la paraestatal.
“Un tandeo es que no haya agua, un tandeo es que no hay suficiente agua para generar presión en la red de agua potable, las colonias más afectadas están en las partes altas de Tijuana, esto significa que no hay suficiente volumen para generar presión, porque el sistema de agua potable funciona bien, únicamente si hay presión”, explicó.
El especialista recordó que 95% del agua que se consume en Tijuana, viene de Mexicali, por lo que el tandeo de agua genera problemas en la infraestructura hidráulica de la ciudad.
“Hay que voltear a ver el agua que se viene de allá, hay que buscar ventanas de oportunidad sin que afecte la actividad agrícola, hay posibilidades de aprovechar los excedentes en la zona de riego, y mejorar la eficiencia de los equipos de bombeo”, apuntó.
SORPRESA EN LA CIUDADANÍA
A menos de dos semanas que arrancará el programa de racionamiento, este ha generado sorpresa en un sector de la población, que teme que este tipo de prácticas se vuelvan frecuentes en la ciudad, como ocurre en otras partes de la República.
“No he tenido problemas con el agua, pero es un tema preocupante, en la Ciudad de México me ha tocado ir y ver cómo cortan el agua debido a la población. El consumo excesivo, la sobrepoblación, las explotaciones de nuestros recursos naturales, son temas que en el pasado se anunciaban de un posible mundo, hoy es una realidad”, expresó Louis Nova.
Para guardar agua, los residentes de Tijuana también han tenido que hacer un desembolso extra, adquiriendo tambos, con costos que ascienden hasta los 450 pesos.
