Alejandra García
Tijuana.- Playas de Tijuana fue el escenario de la misa binacional celebrada por las arquidiócesis de Tijuana y San Diego, este pasado sábado. En la ciudad, la misa fue encabezada por el arzobispo Francisco Moreno Barrón, mientras que, del lado americano, la misa fue guiada por el obispo de San Diego, Robert McElroy.
A través de la ceremonia, las autoridades eclesiásticas hicieron un llamado a favor de los menores, víctimas de la violencia y explotación, carentes de alimento y en condición de abandono. También, ante la realidad migratoria que se vive actualmente en esta frontera, el arzobispo Moreno Barrón celebró la iniciativa de su homólogo en San Diego, al acoger a las mujeres migrantes junto a sus hijos para evitar que sean separados durante su proceso de asilo o refugio.
En la organización también participó la asociación Ángeles de la Frontera, encabezada por el activista Enrique Morones, quien resaltó la importancia de este tipo de acciones en relación a la realidad que viven actualmente las familias migrantes que deciden pedir asilo en los Estados Unidos.
“El interés de realizar estas acciones es sensibilizar en relación al maltrato hacia los migrantes y la separación de las familias, situación administrada desde el gobierno de Estados Unidos, encabezado por el presidente Donald Trump”.
La misa, iniciada al mediodía del sábado, contó con la presencia de autoridades religiosas de distintas partes de la república y América Latina, quienes viajaron a esta ciudad fronteriza con la intención de hacer el llamado todo el continente americano.