Prioridad, a familias sin hogar en Lomas

El delegado del Gobierno de México en Tijuana, precisó que la inversión global en Lomas de la Esperanza es de alrededor de 130 millones de pesos

Juan Miguel Hernández | El Sol de Tijuana

  · jueves 1 de octubre de 2020

Foto: Ramón Hurtado | El Sol de Tijuana

Tijuana.- Las 133 viviendas que se construyen en Lomas de la Esperanza, serán destinadas a las familias que perdieron todo su patrimonio en los derrumbes de Lomas del Rubí, afirmó el delegado del Gobierno de México en Tijuana, Gilberto Herrera Solórzano.

El funcionario federal negó lo dicho por algunos vecinos de Lomas del Rubí, quienes denunciaban que muchos de los favorecidos del nuevo fraccionamiento, tenían su casa con etiqueta amarilla.

“El método de selección lo rige Conavi. Fue para las personas que ya tenían la vivienda colapsada o engomado rojo, que significa un desalojo inmediato. Esas viviendas están en inminente riesgo, se pueden caer mañana o en dos años. Las viviendas con etiquetado amarillo no fueron consideradas, porque según Protección Civil, con un muro de contención o reforzando la estructura, pueden salvarse. Por eso no son parte del programa”, apuntó.

Beneficiarían a 130 de familias de más de 360 damnificadas. Foto: Carlos Luna | El Sol de Tijuana

No obstante, Herrera Solórzano, confirmó que los vecinos de Lomas del Rubí que se muden a Verona, tendrán que renunciar a los predios que les había donado el ayuntamiento de Tijuana, bajo la administración de Juan Manuel Gastélum.

“Muchos querían tener los dos predios, pero les dijimos que eso no iba a ser posible. Les dijimos que le convenía estar en Verona porque no solamente era el terreno, sino era la urbanización y la casa. En Los Pinos solamente es el terreno”, comentó.

El delegado del Gobierno de México en Tijuana, precisó que la inversión global en Lomas de la Esperanza es de alrededor de 130 millones de pesos, que se destinó para la urbanización, terreno y la construcción de las casas, que contarán con 90 metros cuadrados. El proyecto estaría finalizado para el mes de diciembre.

“Este es un apoyo del gobierno federal para tratar un poco el daño de lo que padecieron, pero que no hay que olvidar que los responsables son los malos gobiernos que permitieron que Melo se siguiera expandiendo a costa de más de 150 familias”, concluyó.