Tijuana.- Entre lunes y domingo fueron 230 trabajadores de enfermería los que no se presentaron a su turno de trabajo e iniciaron una protesta de “Brazos Caídos” en el Hospital General de Tijuana para llamar la atención de las autoridades estatales y federales sobre las condiciones precarias con las que dicen trabajan en sus contratos laborales.
Desde las 7:00 horas de este lunes se plantaron enfermeras y enfermeros con pancartas frente al Hospital General de Tijuana, donde poco más de 100 trabajadores de la salud gritaban consignas para ser basificados y mejores condiciones laborales.
Dicen que no reciben sueldo digno, no cuentan con servicios médicos en caso de enfermar y detallaron que al ser contratados de manera temporal no reciben vacaciones, ni generan antigüedad y derechos laborales, esto en el caso de los contratos de trabajadores de Insabi y cubre incidencias del estado.
“No hemos contado con sueldos dignos, con vacaciones, solo los días festivos pero nosotros sí nos cansamos, ocupamos vacaciones porque estamos exhaustos”, dijo Andrea, una enfermera afectada con las contrataciones temporales.
Aseguran que pese a que están en la primera línea de combate a la pandemia, los contratos no les otorgan servicios médicos, cuando han enfermado les ayudan en el Hospital General, pero no tienen derecho a incapacidad y solo se llegan a acuerdos entre los administrativos para que no les descuenten el día.
La falta colectiva mantuvo preocupados a familiares de pacientes con coronavirus, que esperaban afuera del nosocomio, como la señora Victoria Ibáñez, tiene a su hermana grave debido a que está enferma de Covid-19 y el cáncer que previamente padecía, lo que complicó su estado salud, pero dijo se solidarizaron con los enfermeros.
“Se me hace injusto con ellos -enfermeros-, tienen familia y tienen que darle mejores condiciones de trabajo… mi hermana que está aquí que no la atienden porque ellos también tiene sus necesidades”, dijo Victoria.
Hasta el reporte de este lunes 18 de enero, eran 145 pacientes los que estaban hospitalizados en el nosocomio público, 20 de estos pacientes con intubación por complicaciones, y el personal médico enfrentó que tendrá menos personal de enfermería.
Pasadas las 8:00 horas, el gobernador Jaime Bonilla Valdez pasó en su auto Suburban por la avenida Padre Kino, frente al Hospital General de Tijuana, donde se desarrollaba la protesta, pero el mandatario estatal siguió su destino e ignoró al personal de enfermería pese a que le gritaba “Queremos base, queremos base”.
Contrario al gobernador, que los ignoró cuando se trasladaba en su automóvil hacia la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), donde daría su informe sobre la pandemia, fueron decenas de automovilistas los que se solidarizaron con las protestas del personal de enfermería y tocaban el claxon de su automóvil en señal de apoyo cuando circulaban por la avenida Padre Kino..
Por su parte, el secretario de Salud en el estado, Alonso Pérez Rico, comentó que previo a la pandemia del coronavirus la nómina estatal pasaría a la federación y los trabajadores serían basificados por el gobierno federal, pero no se cumplió por la emergencia sanitaria.
“Pero esto tiene que ver con presupuestos federales y estatales, si la federación me dice vamos a federalizar la nómina en junio o julio del año pasado, pero se atravesó la pandemia”.
Mencionó que revisarán si habrá sanciones al personal de salud que faltó a sus labores, pues se puso en riesgo la salud de las personas.