Tijuana.- A pesar de que tiene casi dos años sin el suministro de agua, el recibo le sigue llegando puntualmente a Saúl Servín Sánchez, quien tiene que hacer “malabares” para obtener algo del vital líquido.
El vecino de la calle La Paz en la colonia El Rubí, dijo que han insistido en la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT) para que atienda la denuncia, pero la paraestatal continúa cobrando el servicio, que es de aproximadamente 250 pesos.
Para lograr tener algo de agua, mencionó que debe de levantarse en la madrugada para llenar botes y cubetas, sin embargo, la presión es mínima, por lo que hace imposible incluso que se puedan bañar en la regadera.
Señaló que el problema solo es en su calle, pues el resto de la colonia sí cuenta con el servicio con normalidad y no se ha visto interrumpido en ningún momento.
Servín Sánchez urgió a la CESPT que atienda la denuncia de los más de 30 colonos perjudicados, que no son beneficiados por uno de los derechos humanos fundamentales, como lo es el del acceso al agua.
Indicó que el problema se agudizó tras el regreso a las clases presenciales, hace un par de semanas.
En la misma calle también reside Rosa Herrera, quien en más de 40 años de vivir en su casa, nunca había sufrido de tantos problemas por la falta del vital líquido, hasta los más recientes dos años.
“Con los ratitos que sale el agua, voy a agarrar, pero es muy poco”, lamentó la mujer de la tercera edad.
