Tijuana.-Una bodega del DIF municipal que tenía en su interior más de 1 mil 506 cajas de despensas, fue clausurada.
Según la síndico procuradora, Meli Espinoza, estos productos estaban caducados y no aptos para ser consumidos, según determinó la Coepris.
“Nosotros procedemos a actuar porque es un riesgo que estos alimentos lleguen al consumo de niños”, manifestó.
Meli Espinoza afirmó que supervisar las oficinas municipales es una de sus facultades, negando que sea una provocación hacia el alcalde de Tijuana.
“Tenemos que hacerlo yo creo que por eso la gente reacciona de diferente forma, es un deber que tengo yo revisar cómo están trabajando las áreas correspondientes”, comentó.
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