En una accidentada recepción, llegó el presidente Andrés Manuel López Obrador al ayuntamiento de Playas de Rosarito, ante más de 200 ciudadanos que se dieron cita para hacerle múltiples peticiones.
Grupos como mujeres con cáncer, familiares de desaparecidos y damnificados de derrumbes y deslizamientos en Tijuana principalmente, se dieron cita desde muy temprano a las afueras del edificio de gobierno municipal en la quinta alcaldía de la entidad con la esperanza de ser atendidos por el presidente de México.
El convoy en el que viajaba el mandatario se detuvo unos momentos ante la presencia de los manifestantes, hubo quien desesperado se abalanzó sobre el cofre de la camioneta en la que viajaba López Obrador para pedir su intervención en la procuración de los servicios y medicamentos para pacientes oncológicos, argumentando que el gobierno de Jaime Bonilla Valdez no ha sabido darle una solución real a la problemática de las decenas de pacientes.
Residentes de Playas de Rosarito solicitaron alumbrado, seguridad, certeza jurídica para compras de bienes inmuebles, recolección de basura y apoyos económicos para adultos mayores, personas con alguna discapacidad o enfermedades.
También estuvieron, y como invitados especiales, los representantes de los residentes de Playas de Tijuana afectados por el cobro de peaje de la caseta número 34, ya que en el Ayuntamiento de Playas de Rosarito se llevará a cabo la implementación del programa de 100% de descuento a residentes en el cobro de la caseta Playas de Tijuana.
A la llegada de Andrés Manuel López Obrador al ayuntamiento, también se escucharon los gritos de “Fuera Bonilla”, contra los representantes del gobierno federal en Baja California, y la alcaldesa de Rosarito, Aracely Brown, ya que aseguraron los manifestantes que estos “servidores de la nación” no han cumplido sus promesas hacia la población.
Los residentes de Colinas del Sol estuvieron para agradecer al Presidente el apoyo para la introducción de agua potable
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