Tijuana.- La Subprocuraduría de Justicia en Tijuana, logró la vinculación a proceso de Kevin Armando “N”, quien junto con un cómplice ingresó armado a una farmacia ubicada en la Zona Centro para cometer un asalto, razón por la que además el juez de control le impuso la medida cautelar de prisión preventiva.
Fue el pasado 20 de febrero del presente año que el imputado ingresó a dicho establecimiento, se dirigió al área de refrigeradores y tomo una bebida para luego dirigirse a la caja a pagar, fue en ese momento que un segundo sujeto ingresó a la farmacia y simulando que hablaba por teléfono se formó atrás de Kevin Armando “N”.
Cuando el empleado se disponía a cobrar la bebida, el imputado puso su mano sobre la caja para evitar que esta se cerrará y al mismo tiempo saco de entre sus ropas un arma de fuego con la que amenazó al cajero y le exigió le entregara el efectivo.
El otro sujeto por su parte se dirigió a la parte de atrás del mostrador, notando que había una segunda caja registradora, la cual le exigió a un segundo empleado que abriera, pero al decirle este que él no podía abrirla se molestó y lo tomó del cuello llevándolo hacía un rincón del establecimiento, donde le dijo que le diera entonces su celular y su cartera, pero al no encontrarle nada en sus bolsillos comenzó a golpearlo en la espalda con los puños cerrados, para después decirle que se hincara y no volteara.
Por su parte Kevin Armando “N” le demandó al cajero que le entregará los relojes que estaban a la venta detrás del mostrador, pero el empleado no pudo abrir la vitrina lo que hizo enfurecer al imputado, quien ahora le exigió que le entregará su celular, pero al ver que tampoco traía teléfono intento darle un golpe en la cara; pero el trabajador logró esquivarlo, molestando aún más al agresor, quien le exigió que se hincara de espaldas porque le daría un balazo por haber esquivado el golpe.
El segundo sujeto le dijo al imputado que le disparara al empleado, pero este no lo hizo, si no que le dijo a su cómplice que ya se tenían que ir, dejando así a los dos empleados de espaldas y de rodillas.
Pasados 5 minutos aproximadamente, los trabajadores se levantaron del suelo y activaron el botón de pánico, llegando de inmediato los agentes policíacos.
Tras ser interpuesta la denuncia correspondiente y tras las investigaciones realizadas por esta fiscalía, se logró ubicar y detener a quien fue identificado como Kevin Armando “N”, a quien el juez de control vinculó a proceso por el delito de robo con violencia y le impuso la medida cautelar de prisión preventiva, dando con ello el plazo de dos meses para el cierre de la investigación complementaría.
