Tijuana.- La vida pone obstáculos, pero está en uno superarlos. El tijuanense Jesús Alejandro Terán Gómez ha representado no solo al municipio, sino al estado en diferentes ediciones de la Paralimpiada Nacional con grandes resultados. Un ejemplo de superación.
No se puede vivir por amor al arte y el para-atleta lo sabe. Las pistas de tartán han sido su hogar toda su adolescencia, pero ahora que recién cumplió la mayoría de edad tiene nuevas metas en mente. Nuevos proyectos que afrontar en la vida que ponen al deporte en segundo lugar.
“Ahorita estoy pensando en retirarme ya que voy a entrar a la universidad, pero yo creo que en el primer semestre o dependiendo como vea yo la escuela. Quizás me reincorporo o esperar un poco más de tiempo”, dijo el estudiante de contaduría pública en el Instituto Tecnológico de Tijuana (ITT).
Por problemas en su salud que ha venido arrastrando desde hace algunos años se vio orillado a dejar el deporte temporalmente para recuperarse plenamente de una ulcera de presión que ya busca superar definitivamente. Tuvo que lidiar con dolor por la apretada agenda de competencia que asistía.
“Tengo poquito más de un mes sin entrenar por unos problemas de salud que tengo. Me retiré poquito del deporte. En enero me voy a volver a incorporar”, señaló el bajacaliforniano.
“Como ya me quiero recuperar, ya estoy reposando para ya volver a entrar en el deporte y en la escuela sobre todo porque ya voy a entrar a la universidad”, agregó.
Viene de una paralimpiada nacional en Colima difícil para él. No fue lo que esperaba de su desempeño. Terán Gómez consiguió un par de medallas de oro en 100 y 200 metros, pero en 400 metros tuvo que conformarse con un tercer lugar que lejos de derrumbar sus sueños, lo motiva a entrenar para poder competir en la que podría ser su última participación.
“Este año no fue como yo creí”, reconoció. “En el 400 metros fue donde me ganaron, pero vamos a prepararnos para el siguiente año y ya vemos si nos retiramos o seguimos”, apuntó el atleta.
Una vida en el deporte le ha dejado mucho más que solo la satisfacción de ganar y la competencia, va agarrada con la mano de una hermandad con desconocidos por la empatía de vivir, sufrir y disfrutar a diario la vida.
“El atletismo me ha dejado mucha satisfacción. Mucha alegría porque sí hay mucha convivencia entre nosotros, sobre todo en las competencias nacionales. Sí hay mucha amistad pero sobre todo hay mucha rivalidad. Mucha competencia”.
LA RECTA FINAL
Lo primero en la lista de prioridades deportivas para Jesús Terán es recuperarse completamente de la ulcera de presión que lo aquejó. Recuperar su mejor estado físico pinta como una tarea complicada pero no imposible.
Su siguiente compromiso deportivo podría ser en marzo en Puebla pero aun su participación pende de un hilo. Lo que sí es seguro que participe en el Arizona Desert Challenge, certamen donde la recompensa va más allá de un trofeo. Estará en disputa una plaza para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
“Puedes competir directamente pero sí es un clasificatorio para una competencia internacional como lo son los juegos olímpicos de Tokio”, reveló el estudiante del ITT.
El registro para buscar la plaza olímpica está por debajo de los 14 segundos, una cifra de la que es realista Terán, actualmente no puede acceder, pero con trabajo y esfuerzo busca cumplir la meta más importante de todo deportista.
“Va a ser un desafío volver a ir y ver si puedo entrar el próximo año para Tokio”, reconoció Alejandro.
“Es un tiempo muy bajo. Sí se va a trabajar mucho, demasiado sobre todo por este descanso que he tenido porque no estoy muy bien preparado, pero ya con el tiempo vamos a ver qué tal. Es por debajo de los 14 segundos, lo cual yo no estoy ahorita muy bien preparado, pero vamos a ver qué tal sale”, concluyó el atleta paralímpico.