/ domingo 17 de mayo de 2020

Una nueva vida sin turistas para los animales del zoo

El medio millar de animales de más de cien especies del Bioparc de Fuengirola, parece que tendrán que esperar hasta la fase 2 de la desescalada para volver a recibir a los visitantes

España.- Después de nueve semanas sin recibir turistas, la vida de los animales del zoo de Fuengirola (Málaga) ha cambiado. Desde que, como consecuencia de la Covid-19, el Bioparc cerró sus puertas al público, el comportamiento de muchas de sus especies ha dejado de ser el mismo.

En los que más se aprecia esta modificación de la conducta es en los mamíferos, según ha explicado a Efe la responsable de Mercadotecnia y Comunicación del parque, Marta Pérez.

Toñi y Tissa son una pareja de leopardos que llevan cerca de quince años en el centro. Antes de que cerrara, era muy habitual ver sobre todo a Tissa, el macho, defendiendo su territorio. Pero en estos días, es más común verlo junto a Toñi, tranquilo, sobre las ramas donde suelen estar cuando descansan.

“Por naturaleza, los mamíferos son seres sociales y cualquier estímulo que detectan en otros individuos les atrae y les llama la atención”, y por eso son ellos los que han sufrido grandes cambios en su actitud, explica.

Ares y Den son dos gibones que viven en una isla del parque. Era muy habitual ver a estos monos -monógamos, de brazos largos y sobre un metro de altura- mirando a la gente, saliendo de entre las ramas y cantando a dúo para llamar la atención de los visitantes. Pero ahora, apenas se les ve por su zona.

“Son animales muy curiosos, pero ahora que no tienen los estímulos de los visitantes para salir de la copa de los árboles para ver de dónde viene ese ruido o qué es ese olor se camuflan en la vegetación todo el día”, comenta Pérez.

Cortesía | EFE

En este sentido, indica que esta falta de incentivos es lo que provoca el cambio de actitud en los animales. Los visitantes eran, para la mayoría de las especies, un “enriquecimiento ambiental”.

Detalla que este enriquecimiento ocurre cuando un elemento externo reta los instintos de los animales: una familia está visitando el parque y alguno de los miembros lleva perfume; los mamíferos lo percibirán y reaccionarán a él buscando de dónde y de quién procede. Ahora que no hay público no tienen esas distracciones.

Los potamóqueros (jabalíes africanos), con su peculiar pelaje rojo, patas de color negro y la línea blanca que recorre su columna vertebral, también echan en falta los estímulos que eran para ellos los visitantes.

“He pasado tres veces para hacer fotografías y se acercan hasta el límite de la instalación, hacen sonidos, mueven la cabeza…”, comenta la trabajadora del centro.

Aunque en reptiles y pájaros es más difícil apreciar un cambio de comportamiento, la ausencia de público está favoreciendo la puesta de huevos, sobre todo en las aves de pequeño tamaño. Están en periodo de incubación y se encuentran mucho más tranquilas que cuando recibían visitas.

Marta Pérez destaca que, cuando el zoo está abierto al público, tienen que acotar y observar continuamente la zona de cría para que la gente respete esa distancia con los polluelos. Y, a pesar de sus precauciones, muchas veces intentan sobrepasar la distancia que recomiendan.

“En general ahora todos los animales están más tranquilos”, comenta Pérez, y recuerda que un faisán de Palawan acaba de tener dos pollitos y, Ares, la gibón pareja de Den, está preñada y pronto dará a luz. “Es una pena porque va a tener la cría y la gente no la verá hasta que abramos el parque”.

El medio millar de animales de más de cien especies del Bioparc de Fuengirola -que tras el ERTE del 14 de marzo redujo la plantilla al 23 por ciento- parece que tendrán que esperar hasta la fase 2 de la desescalada para volver a recibir esos estímulos que son para ellos los visitantes y regresar, así, a su normalidad.

España.- Después de nueve semanas sin recibir turistas, la vida de los animales del zoo de Fuengirola (Málaga) ha cambiado. Desde que, como consecuencia de la Covid-19, el Bioparc cerró sus puertas al público, el comportamiento de muchas de sus especies ha dejado de ser el mismo.

En los que más se aprecia esta modificación de la conducta es en los mamíferos, según ha explicado a Efe la responsable de Mercadotecnia y Comunicación del parque, Marta Pérez.

Toñi y Tissa son una pareja de leopardos que llevan cerca de quince años en el centro. Antes de que cerrara, era muy habitual ver sobre todo a Tissa, el macho, defendiendo su territorio. Pero en estos días, es más común verlo junto a Toñi, tranquilo, sobre las ramas donde suelen estar cuando descansan.

“Por naturaleza, los mamíferos son seres sociales y cualquier estímulo que detectan en otros individuos les atrae y les llama la atención”, y por eso son ellos los que han sufrido grandes cambios en su actitud, explica.

Ares y Den son dos gibones que viven en una isla del parque. Era muy habitual ver a estos monos -monógamos, de brazos largos y sobre un metro de altura- mirando a la gente, saliendo de entre las ramas y cantando a dúo para llamar la atención de los visitantes. Pero ahora, apenas se les ve por su zona.

“Son animales muy curiosos, pero ahora que no tienen los estímulos de los visitantes para salir de la copa de los árboles para ver de dónde viene ese ruido o qué es ese olor se camuflan en la vegetación todo el día”, comenta Pérez.

Cortesía | EFE

En este sentido, indica que esta falta de incentivos es lo que provoca el cambio de actitud en los animales. Los visitantes eran, para la mayoría de las especies, un “enriquecimiento ambiental”.

Detalla que este enriquecimiento ocurre cuando un elemento externo reta los instintos de los animales: una familia está visitando el parque y alguno de los miembros lleva perfume; los mamíferos lo percibirán y reaccionarán a él buscando de dónde y de quién procede. Ahora que no hay público no tienen esas distracciones.

Los potamóqueros (jabalíes africanos), con su peculiar pelaje rojo, patas de color negro y la línea blanca que recorre su columna vertebral, también echan en falta los estímulos que eran para ellos los visitantes.

“He pasado tres veces para hacer fotografías y se acercan hasta el límite de la instalación, hacen sonidos, mueven la cabeza…”, comenta la trabajadora del centro.

Aunque en reptiles y pájaros es más difícil apreciar un cambio de comportamiento, la ausencia de público está favoreciendo la puesta de huevos, sobre todo en las aves de pequeño tamaño. Están en periodo de incubación y se encuentran mucho más tranquilas que cuando recibían visitas.

Marta Pérez destaca que, cuando el zoo está abierto al público, tienen que acotar y observar continuamente la zona de cría para que la gente respete esa distancia con los polluelos. Y, a pesar de sus precauciones, muchas veces intentan sobrepasar la distancia que recomiendan.

“En general ahora todos los animales están más tranquilos”, comenta Pérez, y recuerda que un faisán de Palawan acaba de tener dos pollitos y, Ares, la gibón pareja de Den, está preñada y pronto dará a luz. “Es una pena porque va a tener la cría y la gente no la verá hasta que abramos el parque”.

El medio millar de animales de más de cien especies del Bioparc de Fuengirola -que tras el ERTE del 14 de marzo redujo la plantilla al 23 por ciento- parece que tendrán que esperar hasta la fase 2 de la desescalada para volver a recibir esos estímulos que son para ellos los visitantes y regresar, así, a su normalidad.

Local

Bajó el número de trabajadoras sexuales activas en Tijuana, pero Control Sanitario espera aumento en verano

Actualmente tenemos activas ocho mil 422 pacientes, inactivas tenemos 27 mil 395, indicó Judith Romo Solís.

Local

Más del 50% de la niñez indígena en Tijuana no estudia

Pablo Bautista, también candidata para el Distrito 12 por acción afirmativa en Tijuana, destacó que son alrededor de 58 etnias las que migraron desde Oaxaca a la ciudad.

Local

Rezago histórico de entrega-recepción de fraccionamientos al municipio: Canadevi

Se tiene que hacer un proceso de regularizar toda esa parte, porque justo tiene que ver con el ofrecimiento de servicios públicos: Ibarra Quintana.

Local

Día Cero: Tijuana sería la primera ciudad del país en quedarse sin agua

Mario Hernández, investigador de la UNAM, atribuye varios factores por los cuales el suministro de agua potable está en riesgo en Tijuana

Local

Proponen ventanillas únicas para trámites municipales y estatales: Burgueño

Burgueño Ruiz adelantó que la próxima semana presentaría sus propuestas en materia de infraestructura para la ciudad de Tijuana.

Local

BC ocupa los primeros lugares en delitos contra la mujer en el país

Tuvimos una reunión con la fiscal hace un mes donde le dimos a conocer las cifras donde no están juzgando con perspectiva de género, según el protocolo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación: Gina Arana.