Andreína Longoria
Una noche de emociones y realización de sueños vivió Margarita la “Diosa de la Cumbia”, quien ya como una artista de casa se presentó la noche del pasado 5 de octubre en el marco de la vendimia de Bodegas Santo Tomás, festejando además de su reciente cumpleaños, su nueva etapa como diseñadora, y el vino que lleva su nombre creado por la vitivinícola anfitriona y APM Producciones.
Previo a que iniciara el concierto, Margarita mostró a la concurrencia sus creativas prendas, montándose una pasarela con guapas modelos que vistieron las coloridas prendas y accesorios de la ahora diseñadora. Durante el concierto, la cantante advirtió que las ganancias irían a la Fundación de los Niños Down en Mérida.
“Muchas gracias a todos, la verdad este es un sueño que se ve realizado, yo por eso le digo a todo el mundo, nunca suelten los sueños, ¡sí se realizan!, el tiempo que se tomen, no importa, cuando uno no suelta el sueño, el sueño se da, así que muchísimas gracias a todos, por haber asistido, y les invito a que vean el show más maravilloso de la noche y que tomen mucho vino de la ‘Diosa’ por favor, está buenísimo, gracias a todos ustedes, nos vemos al rato para bailar, muchas gracias”, expresó emocionada.
La fiesta inició a las 00:00 horas, cuando el ballet salió al escenario, y acompañados de una gran banda musical, realizaron coreografías en honor a México, al que ahora Margarita, además de su corazón es ciudadana también.
“Buenas noches tengan todos ustedes, me da un gusto enorme estar aquí, es mi octavo año consecutivo, y la verdad tengo que agradecerles con todo mi corazón que hayan venido, porque yo se que hay gente que se espera a que llegue la fecha para encontrarse con la Diosa de la Cumbia, gracias, muchas gracias, y ya saben que a donde llega la diosa, llega la fiesta...”, saludó Margarita e inició con el tema “La Bikina”.
Entre las piezas musicales que incluyó en su divertido repertorio fueron: “Que nadie sepa mi sufrir”, “Pollera Colorá”, “Yo me llamo cumbia”, “Esta vida”, “El Sirenito”, “Negra Tomasa”, “Mi Tierra”, “Tequila”, y “Qué bello”, entre otra más, con las que indudablemente el público bailó durante dos horas de show.
La “Diosa de la Cumbia” llegó al Valle de Guadalupe cumpliendo dos sueños, la creación de su línea de ropa y accesorios “Libertad” y el vino que en su honor se hizo, que lleva su nombre gracias a APM Producciones y Bodegas Santo Tomás, ya que es considerada una consentida para los bajacalifornianos.
Por octava ocasión la intérprete colombiana fue cobijada por una noche de alegría de parte de sus seguidores, como por el del dios Baco, a quien agradeció por tantas bondades y muestras de amor, como a los que elaboraron un vino en su nombre. En esta ocasión compartió escenario con el cantante mexicano más exitoso del momento, Carlos Rivera.
La gente continuó bailando, que ni el frío sintió, agradeciendo a una gran mujer su presencia como parte de su agenda anual, esperando que el 2020 regrese a casa para seguir festejando la vida.
