Tijuana.- Aproximadamente 81 conductas de riesgo entre estudiantes de Tijuana ha registrado la Secretaría de Educación de Baja California en lo que va del del ciclo escolar 2023-2024, de acuerdo con el delegado de educación básica en esta ciudad, Miguel Alfredo Nuño García.
Los reportes más frecuentes, detalló, son acoso escolar, ciberbullying, ingreso de sustancias ilícitas a los planteles, peleas entre los alumnos, acoso sexual, la posesión de armas blancas y autolesiones con cortes en la piel, mejor conocidas como “cutting”.
Como parte de las situaciones más delicadas recordó que recientemente un estudiante atacó con arma punzocortante a una compañera en la Telesecundaria número 55, de la Colonia El Pípila.
“El ciberbullying, también están sufriendo mucho los niños por esta situación”, añadió.
Nuño García consideró que el acceso indiscriminado a plataformas digital puede influir de manera negativa entre los estudiantes que buscan imitar situaciones que observan en redes sociales.
“Ahorita los jóvenes están sufriendo mucho esta situación. Los niños están en las redes sociales con su falta de madurez, se les hace fácil de utilizar y es donde empiezan a ser agresores verbales con sus propios compañeros”, explicó.
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LA ATENCIÓN
Para prevenir, la Secretaría de Educación implementa en los centros escolares pláticas y talleres, dijo el delegado Miguel Alfredo Nuño García.
“Para que vean el alcance que tienen ese tipo de conductas que en ocasiones ellos lo ven como un juego”, manifestó.
El pasado lunes 9 de octubre, alrededor de 500 alumnos de la Escuela Secundaria Técnica 1 de Tijuana respondieron un examen psicométrico.
“Hacemos esta actividad ante la necesidad que tienen los alumnos en cuanto al manejo de problemas emocionales que han manifestado en la escuela y que hemos tenido varios problemas”, manifestó el director Ignacio Victorio Meza.
Compartió que en el ciclo escolar 2022-2023 registraron aproximadamente 24 agresiones contra alumnos y maestros, además del uso de armas punzocortantes para autolesionarse.
“Las conductas de agresión hacia los maestros y a otros alumnos viene desde la situación familiar. Las cuestiones de “cutting” y los intentos de suicido es lo que nos llevó a buscar el tipo de cambios”, agregó.
Los exámenes fueron aplicados mediante un convenio con el Hospital de Salud Mental de Tijuana (HSMT) A.C, para prevenir conductas de riesgos y brindar atención especializada de acuerdo con el diagnóstico.
Mencionó que los 24 casos del ciclo anterior fueron reportados a las autoridades educativas y los estudiantes fueron canalizados a instituciones de salud.
“Después de ser atendidos pueden reintegrarse a las clases o en ocasiones trabajan desde su casa. Dependiendo del contexto”, detalló el director.
Por otro lado, el subdirector de la Preparatoria Federal Lázaro Cárdenas (PFLC), Gustavo Enrique Camargo Negrete, dijo que este mes de octubre llevan registro de un caso de bullying en el plantel.
“Es una matrícula elevada en comparación con otras preparatorias y tenemos diferentes casos, pero no son tan representativos. Numéricamente hablando, alrededor de 4,500 (estudiantes) se nos han presentado al semestre alrededor de 5 a 10 casos a lo mucho”, aseguró.
Añadió que en los dos últimos años han tenido dos intentos de suicido dentro de los baños del plantel.
El director del Hospital de Salud Mental, José Guadalupe Bustamante Moreno, manifestó que buscan realizar pruebas psicométricas a los estudiantes de secundarias y preparatorias tanto públicas como privadas para detectar si algún alumno necesita terapia psicológica u otra ayuda profesional.
Comentó que el instituto busca convenios con los planteles interesados en el programa porque no es obligatorio, el examen tiene un costo unitario de 280.00 pesos y los estudiantes lo responden en los centros de cómputo escolar.
Explicó que el programa “Extramuros”, inició por el incremento de menores de edad en lista de espera para ingresar al HSMT, así que comenzaron a “tocar puertas” en las escuelas para detectar casos de agresiones o intentos de suicidios entre los jóvenes.
“Algo está pasando en la ciudad, queremos buscar la forma de prevenir y prevenir es difícil y complicado con tantas escuelas y tantos niños. Porque sí damos pláticas pero ahí quedan, debemos hacer algo que nos demuestra que hay un problema”, detalló.
Manifestó que los resultados de los exámenes llegarán directamente a los psicólogos del Hospital para ser analizados y determinar la situación de cada uno de los adolescentes.
“Se semaforizan en color rojo, verde o amarillo. Si es rojo de inmediato mandamos a llamar a los padres de familia y se les explica que hay un problema con el niño y que debe de ser diagnosticado”, resaltó Bustamante Moreno.
Compartió que los problemas más notorios en los alumnos son la depresión y la ansiedad, además de algunos intentos suicidas o autolesiones con arma punzo cortante.
