Las construcciones informales de escaleras o muros de contención con llantas han ido en aumento en Tijuana, las cuales podrían colapsar durante las intensas lluvias.
El presidente de la Asociación de Llanteros de Baja California, Marco Antonio Ramos Vigil, opinó que es una infraestructura irregular, pues al querer deshacerse de los neumáticos terminan en colonias aledañas para la retención de viviendas.
“La informalidad de introducción de llantas a la ciudad o al estado ha aumentado, pues son las personas que las proveen las llantas y vemos las escaleras o muros de contención realizadas por ellos mismos”, mencionó.
Señaló que al no ser supervisadas por ingenieros especializados corren el riesgo que en poco tiempo colapsen por los deslizamientos de tierra y así afectando más al drenaje pluvial de la ciudad.
“No cuentan con ningún tipo de ingeniería, lo hacen ellos mismos. Con una creciente o con una lluvia o deslizamientos de la tierra se pueden venir abajo y terminan en arroyos y cañadas, desgraciadamente terminan en el Río Tijuana”, consideró.
Mencionó que debido al descontrol que hay en el sistema de ingreso de los neumáticos antiguos, ha provocado que se usen de manera incorrecta para deshacerse de los materiales.
Destacó que el sector formal tiene el compromiso y la obligación que después de su uso, deben depositarlas a los centros oficiales del estado, los cuales solo hay uno en Mexicali y otro en Ensenada.
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“Los importadores de llantas usadas tenemos el compromiso y obligación de así como nos dan permisos de importación de llantas, esas misma cantidad y tenemos que disponer en los centros oficiales”, apuntó.
Agregó que “buscan la manera de cómo deshacerse de las llantas y desgraciadamente se encuentran en colonias de nueva creación donde entregan esas llantas y hacen los muros de contención o escaleras”.
