Tijuana.- Los residentes de Tijuana se ven obligados a buscar vivienda por la Zona Este debido a que los ciudadanos estadounidenses deciden vivir en la ciudad, por lo que hay incremento en los precios de arrendamiento y venta, opinó la abogada corporativa, Ana Erika Santana.

“Nos afecta porque eso gentrifica la ciudad y suben los precios, no nada más del costo de la vivienda en sí para la venta, pero también para el arrendamiento y genera que nuestros propios ciudadanos se vayan a la periferia”, detalló.

Consideró que hace falta generar políticas públicas en el Congreso y autoridades locales para crear estrategias con el fin de regular la vivienda en el mercado de la ciudad.

En otro tema, indicó que los responsables en negociar el agilizar el cruce binacional son Relaciones Exteriores, el gobierno estatal y la Secretaría de Economía de Baja California para generar mesas de trabajo con las autoridades de Estados Unidos.

“Son relaciones exteriores que tiene que ver la parte de los senadores en temas internacionales, quienes son los indicados por orden constitucional de ver temas bilaterales o internacionales, el gobierno del estado y la Secretaría de Economía”, mencionó.

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Erika Santana propuso intervenir con estrategias para desfogar las largas filas que se mantienen en las garitas de San Ysidro y Otay, tanto peatonal como vehicular.

“Porque no generan un escaneo facial, fastpass o tener SENTRI, pero al revés, para que puedan circular la gente, no se les ocurre, es un gran costo tener a la gente encerrada”, expresó.

También señaló que las largas filas y congestionamiento vial afectan al sector gastronómico y hotelero de todo el estado, ya que el turismo del sur de California bajó en este año.

“Inhibe también la inversión y la visita turística que ha bajado muchísimo, en el Valle de Guadalupe bajó, los restaurantes y hoteles se vieron afectados porque dejaron de cruzar”, comentó.