El flujo de personas en los restaurantes y la playa de la ciudad disminuyó durante esta última semana debido al Covid-19, señalaron comerciantes del área.
"Bajó muchísimo la venta, a la mitad; andaba vendiendo como mil, mil 500 pesos por día y ahora estoy vendiendo 200, hasta 400 pesos; la gente sí viene a la playa, poca, pero sí viene, pero no compra por miedo a que se contagien de coronavirus", declaró Carlos Macario, quien es vendedor de churros y plátanos machos fritos en el malecón de Playas de Tijuana.
Dijo que los dueños del carrito de churros le comentaron que de continuar las ventas de esa manera, se verían en la necesidad de descansarlo debido a que "no está saliendo ni para mi sueldo. No sale".
En tanto los restaurantes del área han tomado diversas medidas, como recortar los días y las horas laborales de los empleados, así como ofrecer el servicio para llevar a los comensales, ya que buscan que no se propague la enfermedad respiratoria en la ciudad.
En un recorrido que realizó El Sol de Tijuana, se observó a decenas de personas caminando por la arena de la playa y sobre el andador de madera. "Yo no creo que sea tan grave lo del coronavirus porque no se ha declarado ni una sola emergencia en todo el estado, yo por eso continúo haciendo mi trabajo”, platicó una mujer de nombre Guadalupe Gutiérrez.
"Me parece que sí debemos tomar medidas para prevenir esta enfermedad, pero la playa está sola y la gente no está viendo, por eso es que vengo, porque está sola la playa", mencionó una persona de nombre Rodrigo Villalobos.
La semana pasada, el presidente municipal de Tijuana, Arturo González Cruz, exhortó a los restaurantes y demás establecimientos a no abrir sus puertas durante la contingencia con el fin de evitar la propagación de Covid-19 en este municipio.