Tijuana.- Son diferentes los vendedores que forman parte del paisaje de la zona Centro. Los que ofertan comida, los que venden revistas y hasta aquellos que caminan con juguetes.
En un recorrido por el lugar pudimos platicar con algunos de ellos, como lo fue con el señor Ramiro Anaya, quien ha laborado por más de una década en el parque Teniente Guerrero en su puesto de bolero.
“Esto yo lo he visto como una tradición de antaño. Todavía hay mucha gente que usa calzado para bolear, que trabaja en oficinas, en empresas, pero sí ha bajado porque ya muchos usan puro tenis”, platicó.
Si bien se puede lustrar el calzado en casa, lo hecho por boleros es profesional, añadió Ramiro. “Hay una diferencia, aunque trates de hacerlo igual no lo haces, el calzado no queda igual, por eso hay muchas personas aunque tienen su kit en casa vienen de vez en cuando a darse su boleada”, afirmó.
Existen otros vendedores que ante el paso de la tecnología han visto complicado mantenerse en pie, como el señor Antonio Velázquez, quien lleva 17 años atendiendo un puesto de revistas ubicado sobre la avenida Constitución, en la calle Segunda de la zona Centro.
“Ya no compran como antes, ya se acabó todo eso. Yo tenía clientes que venían del otro lado (Estados Unidos) y se llevaban varias revistas. Ahora es contada la revista que se vende y es porque quieren saber algo del chisme o algo así, porque en la televisión no se dan cuenta de todo”, narró.
También en el camino se observó a los que venden churros de azúcar, aguas frescas y fruta colocada de manera ordenada en una vitrina, quienes junto a otros comerciantes de la zona Centro forman parte de una de las estampas de la ciudad que se mantienen vivas.
