Manifestantes de la Alianza por una Vida y Justa, bloquearon la vialidad de la 5 y 10 en todas las direcciones, así como el puente vehicular, después de sostener una reunión con Marina del Pilar Avila Olmeda, gobernadora de Baja California, que se llevó a cabo en las instalaciones de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (Cespt).
Los manifestantes representan a Terrazas del Valle, Taxis Rojo y Negro, Lomas del Rubí, Parque Benito Juárez, Playas de Tijuana, Maclovio Rojas y la colonia 3 de Octubre.
“Desde un principio hubo restricciones, no nos dejaron pasar con nuestros celulares, no nos dejaron entrar a todo el comité. Casi al terminar la reunión, la gobernadora no escuchó a los compañeros transportistas, se levantó de la mesa y se retiró, no firmó acuerdos”, señaló Casandra Hernández, representante de los manifestantes.
Posterior a la reunión en la Cespt, que se llevó a cabo durante la mañana de este lunes, los miembros de la Alianza decidieron realizar los bloqueos en la 5 y 10, que inició a las 15 horas, y permanecieron hasta las 16 horas aproximadamente.
“Esperábamos y teníamos un poco de buena fe de que hubiera conciencia con los compañeros por parte de la gobernadora y con el secretario Catalino, de que retomaremos la mesa de trabajo nuevamente, pero no hubo ese acercamiento”, agregó la representante de la Alianza.
Después de que finalizara la manifestación, Catalino Zavala Márquez, secretario general del Gobierno del Estado, dio una conferencia de prensa donde mencionó que el estado respetaba todas las formas de expresión, pero consideraban que no había una justificación para el bloqueo de la 5 y 10.
“Porque plantearon que se genera en los acuerdos, estuvieron ellos de acuerdo con las propuestas de la gobernadora (...) Aquí están los compromisos que ellos aceptaron con la gobernadora, duramos dos horas y media platicando”, añadió el funcionario estatal señalando una hoja de acuerdos.
Sobre los señalamientos de los manifestantes que mencionaron que Ávila Olmeda se retiró cuando los transportistas de Rojo y Negro expondrían sus exigencias, Zavala Márquez dió su versión de lo sucedido.
“La gobernadora al finalizar la intervención de los líderes transportistas se disculpó y planteó que tenía que atender otros temas de agenda que llevaban de retraso una hora (...) lo que no puede decirse es que no hubo atención y que no se escuchó, incluso lo más importante, se hicieron acuerdos aceptados por ellos”, agregó.
Para finalizar, Zavala Márquez expresó que el gobierno estatal rechaza las acciones que realizaron los manifestantes, pero dijo que insistirán en el diálogo y no en el uso de la fuerza pública en caso de que se registren más movilizaciones.
“Lo que no puede hacerse es emplazamientos que no tengan sentido, y que su demanda, justa, el único motivo o argumento válido que pudiera tener para realizar una protesta, no ahí, no afectando a terceros, pueden manifestarse en las plazas, hay muchos espacios para expresarse (...) pareciera que la intención es crear otra circunstancia, y no hay razón para ello porque el estado está atendiendo”, finalizó.
