Tijuana.- Grupos de migrantes que buscan asilo humanitario en Estados Unidos han estado cruzando el cerco fronterizo en inmediaciones de la avenida Internacional para entregarse a la patrulla fronteriza.
Durante el transcurso de este jueves los agentes estadounidenses les permitieron la entrada a cierto número de ellos, para continuar con su proceso.
Los migrantes permanecieron un periodo de tiempo a la intemperie, ya que lograron cruzar uno de los dos muros fronterizos que dividen ambos países y esperaron en suelo norteamericano.
En un recorrido realizado por El Sol de Tijuana, se observó un grupo no mayor a cinco personas que eran trasladadas por agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), a lo largo de la valla.
Al mismo tiempo, otras 12 personas, incluyendo a dos menores de edad y dos mujeres, eran entrevistados por la patrulla fronteriza.
Un agente les hizo varias preguntas, solicitó se retiraran joyería e hizo una breve inspección corporal, aparentemente para verificar que los migrantes no tuvieran tatuajes en muñecas y pecho.
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A los migrantes también les solicitaron recoger botellas vacías de agua, empaques de comida y mantas térmicas que habían dejado en el lugar.
En la última semana, quienes transitan por la avenida Internacional, a la altura de la Unidad Deportiva Benito Juárez en la colonia Zona Norte, han notado que personas permanecen día y noche a la intemperie esperando que les permitan ingresar a Estados Unidos.
Hasta el momento CBP no se ha pronunciado por estas recientes detenciones, aunque su oficina en San Diego compartió en comunicado de prensa informando que el número de migrantes que intentan cruzar de manera ilegal a través del área de Otay Mountain Wilderness, que en el lado mexicano es la colonia Nido de las Águilas, ha ido en aumento.
Indicaron que durante la última semana de marzo, tres grupos conformados por al menos 25 migrantes, quienes denunciaron haber sido víctimas de asalto por sujetos desconocidos que portaban armas largas y cortas, despojándolos de su dinero en efectivo y teléfonos celulares.
Todos los migrantes “fueron evaluados médicamente, detenidos y luego transportados a una estación cercana de la Patrulla Fronteriza para su procesamiento”, añadió el CBP en su comunicado.