Tijuana.- Mientras las playas de Tijuana son aptas para uso recreativo luego de las lluvias del pasado fin de semana, en San Diego, donde desemboca el Río Tijuana, permanecen cerradas por altos índices de contaminación.
De acuerdo con un muestreo de análisis bacteriológico realizado por Proyecto Fronterizo Educación Ambiental A.C (PFEA) este jueves 24 de agosto, las zonas de El Faro, El Vigía, Cañada Azteca y Parque México, arrojaron menos de 200 enterococos por cada mil mililitros.
La única excepción es Playa Blanca, ubicada al sur de las costas de Tijuana, que desde hace varios años mantiene niveles altos de contaminación por el derrame de aguas residuales pero el acceso está prohibido.
En el norte, las playas de San Diego desde la región de Tijuana Slough en Imperial Beach, hasta La Joya, el acceso está cerrado, de acuerdo con la organización ambientalista San Diego Coastkeeper, que monitorea la contaminación del mar.
“Los niveles de contaminación superan los estándares de salud. Evite el contacto con el agua en el área hasta nuevo aviso”, advierten en su portal digital.
TIJUANA NO ESTÁ TAN LIMPIA
El encargado del primer turno de la División de Rescate Acuático de la Dirección de Bomberos Tijuana, Jesús Díaz, dijo que generalmente a 72 horas del paso de las lluvias las personas ya pueden acceder a la playa.
Señaló que en días pasados se podía observar a lo lejos las consecuencias de las corrientes que arrastró la tormenta tropical Hilary.
“No se vio basura, pero sí el mar bastante sucio, luego luego se ve todo café, se contamina”, indicó Jesús Díaz.
Comentó que las corrientes en el Pacífico son de sur a norte, por lo que esa contaminación se va a Estados Unidos, como sucede con la desembocadura del cauce del Río Tijuana.
La coordinadora de Proyecto Fronterizo Educación Ambiental A.C (PFEA), Delia Castellanos, apuntó que el problema de la contaminación en Estados Unidos empeora porque el alcantarillado y el pluvial están conectados en muchos puntos de la ciudad, y terminan en el cauce del río.
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Y añadió que no es recomendable el ingreso a la playa a una semana de que haya caído lluvia.
Explicó que aunque en sus muestras los niveles de contaminación son bajos, esto no significa que no haya riesgos a la salud por la contaminación de días anteriores.
“No es que desaparezcan estos contaminantes, si no que se dispersan y la concentración disminuye”, señaló Delia Castellanos.
Subrayó que los contaminantes no solo están en el agua del mar, sino también en la arena, donde se genera un cultivo de microorganismos, con el que las personas no deberían tener contacto.
Recordó que desde hace varios años hay derrames no controlados de aguas residuales directos al mar, por lo que “no es recomendable ingresar con lluvia o sin lluvia”.
Margarita Díaz, directora de PFEA, dijo que en cada precipitación como la del fin de semana, que dejó dos pulgadas de lluvia, la alcaldesa de Tijuana, Montserrat Caballero, debió convocar a sesión extraordinaria del Comité de Playas Limpias.
BUSCAN HOMOLOGAR CON SAN DIEGO CRITERIOS PARA MEDIDAS PREVENTIVAS
Delia Castellanos señaló que han buscado homologar los criterios de cuidado y prevención a la salud pública con los que se toman del otro lado de la frontera, a escasos kilómetros, en las playas de Imperial Beach, no solo poner letreros de advertencia.
Expuso como ejemplo las medidas que han tomado en el municipio de Ensenada, donde han cerrado físicamente el paso a las playas a consecuencia de las descargas de aguas negras por fallas en las plantas de tratamiento.
“Muchas veces dicen que esto es violentar los derechos libre a la playa, pero también se están violentando el derecho a la salud. Todos son importantes, a recrearte o acceder a enfermedades”, apuntó la coordinadora de PFEA.
Los riesgos a la salud incluyen infección en la garganta por la brisa, problemas de piel, en los oídos, en los ojos y gastrointestinales si se consume mucha agua, de acuerdo con algunos alergólogos, añadió.
Jesús Díaz, el encargado de turno en Playas de Tijuana, comentó que regularmente los días cálidos de verano atraen entre seis mil y ocho mil personas a Playas de Tijuana.
“Nuestra principal función es informar a los visitantes sobre los posibles peligros como las mareas altas, las fuertes corrientes, hoyos y principalmente cuando se puede percibir contaminación en el agua”, puntualizó.
