Asociaciones civiles están preocupadas por las consecuencias que pudieran generar la posible relación de personal de migración con el tráfico de personas.
Claudia Portela, coordinadora del Desayunador Salesiano Padre Chava, calificó como lamentable que dos trabajadores del Instituto Nacional de Migración (INM) asignados a Tijuana, fueran destituidos de sus puestos al ser investigados por autoridades federales.
“Al final uno tiene que creer en las instituciones, como ciudadanos y como activistas, lo que hacemos es tratar de hacer que las personas en contexto de movilidad crean en las instituciones, se acerquen, no tengan miedo y este tipo de situaciones la empañan”, expresó.
Los trabajadores del INM son Marte Antonio y María Elizabeth, detenidos luego de un cateo a un domicilio ubicado en Villas de Santa Fe Quinta Sección.
En este decomiso a la pareja le fueron decomisados 15 cartuchos calibre 9 mm, uno de ellos con punta expansiva, así como un millón 90 pesos y 27 mil dólares en efectivo.
Claudia Portela señaló que esta situación, además de “manchar” al INM, porque queda como una institución no transparente, también daña a los albergues y asociaciones civiles que apoyan a las personas en contexto de movilidad.
La coordinadora del Desayunador mencionó que actualmente la relación entre la asociación y el INM no es óptima, pero ha mejorado, y que los acercamientos han sido para solicitar orientación y ayuda en ciertos casos.
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Luego de que trascendiera la noticia del despido del personal, Claudia Portela consideró que el INM debería evaluar a todos sus elementos para verificar que no participen en actividades ilícitas.
Agregó que anteriormente personas en tránsito han mencionado “rumores” de que al interior del INM existía un trato especial, pero nunca lo consideraron como un hecho.
Claudia Portela hizo un llamado a la autoridad para que este tipo de situaciones no se vuelvan a repetir.
