En caso de que no se actúe de manera inmediata para atender la contaminación que existe en el Río Tijuana y en el Alamar, en la próxima temporada de lluvias se prevén más daños a las playas de ambos lados de la frontera.
Lo anterior lo expuso la gerente de Residuos Marinos en Costa Salvaje, Rosario Norzagaray, quien alertó a las autoridades para que atiendan de manera emergente el tema.
"El mal olor que se percibe es el menor de los problemas, en esas descargas de aguas residuales van todo tipo de contaminantes que van a llegar al mar y van a alterar esos ecosistemas costeros y marinos de los que también somos usuarios y consumidores", expresó.
Y remató: "Tenemos prácticamente el siguiente periodo de lluvia en puerta y si no sacamos esa basura de ahí, la siguiente lluvia fuerte la va a arrastrar río abajo y se contaminará severamente el estuario y las playas en ambos lados de la frontera".
La activista enumeró las organizaciones que tienen que poner manos a la obra para evitar mayores daños al medio ambiente, situación que no ha encontrado solución desde hace varios años.
"Llamamos al gobierno, a las dependencias competentes y a organismos en Tijuana que pueden hacer la diferencia, por ejemplo Conagua, CESPT, DOIUM, DSPM, las distintas cámaras de comercio, los empresarios, los organismos de la Sociedad Civil, a todos los interesados en cerrar filas para atender nuestro problema, y digo nuestro porque aquí vivimos y porque es nuestra casa y no tenemos otra", aseveró.
Remarcó la preocupación por el vertido de las aguas negras que van al mar desde la ciudad Tijuana, pues todavía está sucediendo y está acompañado con basura mal dispuesta que es arrastrada por los canales, arroyos y cañadas.
"Esta doble contaminación de agua residual y basura provoca derrames, anegamientos e inundaciones, particularmente durante temporadas de lluvia, como por ejemplo los múltiples taponamientos en el sistema de alcantarillado y drenaje pluvial por distintos puntos de la ciudad y que se evidencian como derrames y escurrimientos de esas aguas negras en las calles por las coladeras, como si fueran fuentes en medio de las vialidades", puntualizó.
La gerente de Residuos Marinos en Costa Salvaje hizo énfasis en que en la canalización del Río Tijuana está siendo severamente impactada, como nunca en los últimos 25 años, tanto por el problema de las descargas de agua negra ,como por la basura que llegó arrastrada por las corrientes de agua del último periodo de lluvia.
"Así como por la basura que llevan las personas que están refugiándose en la canalización porque no tienen donde vivir. Mucha de esa basura son diferentes tipos de plásticos y todos tardan muchos, muchos años en degradarse, particularmente en el tramo donde no hay canal piloto, que viene del Arroyo Alamar, entre el puente del Murua y el entronque a la altura de la Central Camionera", concluyó.
Rosario Norzagaray mencionó que la salud de las personas que habitan en la canalización está siendo muy afectada