Tijuana.- La propuesta de utilizar el tren de la vía corta Tijuana-Tecate como alternativa para exportar mercancías a Estados Unidos y reducir el flujo de trailers en la zona de exportación de Otay, es poco viable por la falta de infraestructura, dijo Marco Antonio Pérez, miembro de la Mesa Directiva de La Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar).
“Para habilitar un sistema de ferrocarril se necesita un espacio muy grande para hacer una terminal, donde el tren pueda llegar y los contenedores puedan ser descargados, porque los parques industriales están diseminados por toda la ciudad”, señaló.
Marco Antonio Pérez comentó que Estados Unidos también tendría que construir una terminal ferroviaria, para que el tren pueda llegar y descargar todos los contenedores y trasladarlos a su destino final.
Explicó que el tren no puede pasar a las compañías manufactureras a recoger el material, porque estas están ubicados en diversos puntos de la ciudad, incluso en medio de fraccionamientos habitacionales.
Por este motivo, las industrias tendrían que seguir utilizando camiones para trasladar la mercancía a una terminal cercana al tren.
“De todas maneras, para llegar a la terminal del ferrocarril tanto en Tijuana como del otro lado de la frontera ocuparemos los tractores y chóferes que muevan esas cargas. Será complicado hacer una terminal que evite el tráfico no solo en Otay sino en todas las zonas de ciudad”, apuntó el experto de la Canacar.
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La propuesta del uso de la vía corta, fue anunciado por Antonio Rodríguez Otáñez, director general de Admicarga, como una alternativa para la exportación de mercancías a Estados Unidos
“Trae beneficios desde temas ecológicos, el factor social de las largas filas y el tráfico, y también el desarrollo económico del estado”, expuso.
Actualmente, el ferrocarril mueve desde Estados Unidos a Baja California, entre otras cosas, insumos para la cervecera y gas, pero regresa vacío.
