Tijuana.- Presentando su exposición “Coser y tejer” en la galería del Centro Estatal de las Artes Tijuana (Ceart), la artista textil originaria de esta misma ciudad, Oslyn Whizar, habló con El Sol de Tijuana sobre su evolución artística de la mano con su historia personal.
¿Por qué arte textil?
Empecé a pintar, pero cambié a un estudio grande y recibí una donación de telas muy grande. Toda la carrera me había interesado el material, ¿cómo podía usar una cosa en vez de otra para hacer la misma disciplina? La tela me vino muy bien. Empecé a querer pintar con la tela y a explorar como si fuera una mancha. Todos estos son ejercicios de manchas, de cómo pude hacer composiciones abstractas con las telas a partir de las cualidades que veía, eran muy parecidas a las de la pintura acrílica.
Utilizo mucho materiales de reúso, tengo una tienda y crecí muy cercana, como muchas mujeres aquí, a la costura. Mis dos abuelas cosían, mi madrina de bautizo tenía una tienda de ropa de segunda en “Las Carpas”, y mi padrino tenía la fábrica de telas de donde recibí la donación, fueron mis padrinos de material.
Tuve una tiendita, todavía vendo poquita ropa, pero cuando iba a surtir encontraba muchas telas que les llaman “death stocks”, que sobran de las fábricas. La obra se fue haciendo como un collage textil, con joyería, ropa reciclada y muñecos.
¿Cómo iniciaste en el arte?
Mis papás me metieron a danza y luego a la Casa de la Cultura. En mi primera exposición colectiva de manera muy inocente dije: “Creo que aquí me siento cómoda”. Entre mis 18 y 19 años empecé a decir: “Aquí me gusta y puedo hacer esto”. No sentí una certeza, pero nunca me había sentido tan en mi piel como ahora después de tanto tiempo.
Sales de la carrera y no sabes qué hacer. Hace más de 10 años empecé a trabajar en logísticas, de secretariado y de manager, cada vez con más ganas de hacer lo mío. Cuesta trabajo porque lo económico te da estabilidad, empiezas a vender de una manera muy extraña, las ventas son algo como místico, porque más o menos sabes cómo poner tu precio.
Me parece importante que los futuros artistas consideren que no solamente se vive de vender arte, eres creativo y puedes hacer muchas cosas como objetos decorativos, trabajar en museos y ahora con las redes sociales puedes llevar un blog y hasta te pagan por escribir.
¿Hay audiencia en Tijuana?
Hay audiencia, me sorprendo. En general hay una pesadez, una negatividad, todavía no hay suficiente cultura como puede haber en Ciudad de México. Si vas y vienes, dices: “Aquí no hay nada”. Pero estando en la exposición me he dado cuenta que sí vienen personas.
Es importante que sigan haciendo actividades y se mantengan porque es una escuela que va a ir creciendo, es una cultura que se va a ir generando a partir de que existan los lugares.
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¿Es difícil para una mujer abrirse paso en el arte?
La estadística marca que solamente el 5% de las artistas mujeres llegan a los museos a nivel mundial. Nunca me he puesto la capa feminista, creo que ahorita todos somos feministas.
No me he enfrentado directamente a violencia de género en el ámbito de las artes, pero sé que muchas otras sí.
¿Qué papel tienen las redes sociales en el arte?
Cuando saqué mi cuenta de Instagram me fasciné de todo lo que podía ver. Pero también hay otro factor, cambia la visión del espectador. Es un segundo y puedes decir: “Esto ya lo ví”, pero en realidad no lo has observado, no te has dado tiempo.
Creo que la mirada está cambiando, lo ves todo tan rápido que es difícil darte el tiempo de observar cómo está hecho o cómo se ve en vivo.
No sé qué vaya a pasar en el futuro, es un arma de dos filos. También me daba a conocer mucho por las redes, llevo mis redes como un portafolio pensando que va a ser el portafolio del futuro, que van a quedar las redes ahí por años y años.
¿Algún consejo para jóvenes artistas?
Que trabajen mucho, que no se dejen amargar. Cuando sales tienes que hacer un currículum para llegar aquí, pero ¿cómo te haces el currículum si en todas partes te piden un currículum? Eso muchas veces da para abajo. Es difícil, cuando eres artista joven, tener certeza del futuro, pero el trabajo nos salva a todos, y no darte por vencido.
Hacer arte no es hacer solamente el objeto. Hacer arte es hablar contigo.
¿Qué proyectos vienen para Oslyn Whizar?
Acabo de firmar un convenio con la Universidad de las Californias para recibir alumnos que quieran hacer sus prácticas profesionales, tienen artes visuales y diseño de modas.