Crisstian Villicaña
Tijuana.- Una vez que han conseguido llegar a la frontera con Estados Unidos, muchos de los migrantes se cuestionan en qué consiste el proceso de asilo, mostrando una preocupación y desconocimiento de lo que les espera.
Guillermo, quien luego de responder las preguntas que le hacía, me comenzó a cuestionar qué tan difícil era obtener el asilo, qué hay de la fila para formarse en la garita, en cada pregunta se dejaba entrever la esperanza, pero a la vez el miedo de aventurarse a una situación de la cual no se tiene referencia y por ende, no se sabe cómo terminará.
"¿Tú sabes a cuántas personas le dan el asilo, de unos cien por ejemplo se lo dan a cinco o a cuántos?", me cuestionó; a lo que tuve que responder que tanto para centroamericanos, como mexicanos las oportunidades de obtener asilo se han hecho cada vez menores, esto por la política anti migratoria del presidente estadounidense, Donald Trump.
"Yo quiero un permiso de unos dos años para trabajar, que me dieran la oportunidad, y si me porto bien poder estar otros dos años, tener la oportunidad de demostrar que puedo trabajar, es lo que estoy buscando y por eso salí de mi país, porque no hay empleo", narró.
De manera lamentable, como me lo comentó en días anteriores en una entrevista el presidente de Ángeles de la Frontera, Enrique Morones, la mayoría de los que piden asilo no lo obtendrán, ya que la falta de un documento que logre evidenciar que salen huyendo de su país por ser víctimas de violencia, suele ser uno de los factores que termina siendo determinante para que se les niegue el asilo.
La realidad es que muchas de las personas que han llegado en la Caravana Migrante desconocen qué le sigue ahora que ya están en Tijuana, a metros de concretar su propósito se cuestionan qué tanta esperanza tienen y sí su historia puede llegar a convencer a los agentes de migración de los Estados Unidos y con ello, iniciar una nueva vida.