Tijuana.- La venta y uso de pirotecnia y explosivos están prohibidos en Tijuana. No así las luces de bengala o las llamadas “cebollitas”, porque no emiten ruido.
Pero a más de cuatro años de la modificación del Reglamento para la Prevención y Control de Ruido que así lo estableció, los promotores de esa iniciativa muestran su decepción por la falta de conciencia que aún existe en una parte de la población y entre las mismas autoridades.
En estas fechas el Ayuntamiento de Tijuana intensifica los operativos para detectar la venta de pirotecnia, sin embargo, dice que hay factores fuera de su control que influyen en la oferta y uso. Por ejemplo, que en Tecate y Playas de Rosarito la venta de cohetes no está prohibida.
A pocos días de haber iniciado con esos operativos, los decomisos de pirotecnia ya alcanzan casi la mitad de los resultados en 2022 y ya se registró una tragedia por el uso de explosivos.
LA REFORMA
Antes de que el Cabildo de Tijuana aprobara las modificaciones al Reglamento para la Prevención y Control de Ruido hubo mesas de trabajo en las que participaron psicólogos, médicos, animalistas y otros expertos que expusieron los daños a la salud causados por la pirotecnia a personas y animales sensibles al ruido.
“Se coincidió que el ruido en un decibel muy alto podía generar afectaciones emocionales y de salud. Aquellas personas que tienen estas condiciones, pero también a los animales que son un grupo de la sociedad que está relegado y que no se percatan los humanos del grave riesgo”, explicó el director de litigio estratégico de Abogados Animalistas de México, Frank Ortiz González.
Sin embargo, el activista señala que la falta de conciencia de los efectos dañinos por el uso de explosivos se muestra en la habitual venta durante esta época decembrina y el ejemplo que pone el gobierno de la ciudad.
“No ha habido una disminución, al contrario. Es muy lamentable que justamente en esta administración de la alcaldesa Montserrat Caballero Ramírez se haya utilizado la pirotecnia en distintas ocasiones, como fue el 16 de septiembre del 2022 y 2023”, comentó.
“Es un reglamento que nadie respeta, que la propia autoridad municipal no ha querido observar en tanto las sanciones que amerita, pero también a la prevención de estas situaciones. Si la misma autoridad municipal no lo respeta, el ciudadano tiende a seguir estos mismos lineamientos”, añadió.
Precisamente sobre el uso de la pirotecnia en los festejos del Grito de Independencia por parte del ayuntamiento de Tijuana, Ortiz González, indicó que aún sigue en curso la queja que interpusieron ante la Sindicatura Procuradora y esperan los avances.
“En estos meses de diciembre donde es muy común en peregrinaciones y eventos de fin de año que se usan explosivos, estamos justamente a la espera de generar ante la autoridad federal un procedimiento que ayude al ayuntamiento a prever las condiciones de seguridad y el cumplimiento del reglamento”, abundó.
El activista desglosó una serie de agravios que sufre la población y el medio ambiente, derivado del uso de explosivos.
“Todo explosivo es peligroso, el mal manejo del fuego es peligroso. Hemos visto siempre las consecuencias del mal uso y de las malas experiencias del uso de la pirotecnia, con niños que pierden extremidades, hombres y mujeres que son lastimados por los explosivos, animales que mueren de infartos, niños que sufren ataques de ansiedad y la calidad de aire en estas fechas que hay uso indiscriminado de explosivos, que se genera un medio ambiente insalubre”, expuso.
Apenas la noche del pasado viernes 8 de diciembre, en la colonia Villa del Campo, ardió una estructura de dos niveles que en la parte baja tenía locales comerciales y en la parte superior un domicilio; murió un menor de 15 años de edad.
“Tenían una concentración importante de pirotecnia en un lugar que no era el adecuado”, confirmó el secretario de seguridad ciudadana de Tijuana, Fernando Sánchez González.
“Ciertamente es una lucha que todavía tenemos en nuestra sociedad, porque la pirotecnia es parte de nuestras fiestas, de nuestras festividades, es algo muy común. Como sociedad debemos ir avanzando de que no es conveniente y no es permitido, pero en medida que haya quien compre, vamos a tener quien la venda”, agregó.
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¿QUÉ ESTÁ PROHIBIDO Y QUÉ ESTÁ PERMITIDO?
Las conocidas como “cebollitas”, o luces de bengala, son fuegos artificiales que se pueden comercializar en Tijuana y por consiguiente, usar en esta frontera, explicó la coordinadora de Inspección y Verificación Municipal, Michel García Arceo.
“Toda aquella que emita algún sonido está prohibida, incluso, nosotros otorgamos permisos por la época decembrina para venta de luces de bengala”, puntualizó.
Debido a la demanda de este tipo de productos, para la temporada que va del 1 de diciembre al 6 de enero la administración municipal otorgó 250 permisos a un costo que oscila entre los mil 300 a mil 500 pesos cada uno para la venta en vía pública, precisó.
“El ayuntamiento lo otorga y se especifica que es para luces de bengala. Así viene tal cual y se especifica que viene una observación: está prohibida toda aquella que emita un sonido, incluso es motivo de revocación de permiso”, agregó.
De acuerdo con la coordinadora García Arceo, los cohetes conocidos como “Cherry Bombs” son uno de los productos prohibidos, por lo que deben hacer operativos constantes en sobreruedas, puestos ambulantes y negocios establecidos.
“En los operativos en sobreruedas hemos visto que aparentemente estaban vendiendo cajitas de luces de bengala, las movimos un poco y encontramos esta pirotecnia que genera sonido. Procedimos a procesar esa mercancía, porque no vamos a tolerar que estén vendiendo esta pirotecnia que es ilegal y que afecta tanto a nuestras mascotas”, aseveró.
La sanción al comercio ambulante por la venta de pirotecnia alcanza los cinco mil pesos, mientras que para los negocios establecidos significa la clausura inmediata, así como la revisión de otras licencias y permisos municipales, precisó.
También admitió que una de las razones por las que el uso de pirotecnia no ha podido ser detenida en Tijuana es la venta no regulada en municipios vecinos.
“Está fuera de nuestras facultades por desgracia, pero mucha gente comenta que la compra en Rosarito y muchas veces la revenden en Tijuana y la detonan en Tijuana. Si se detecta al revendedor podemos sancionar, si detona ahí es seguridad pública la encargada”, detalló.
La coordinadora de Inspección y Verificación, aseguró que los operativos continuarán toda la temporada y el año pasado decomisaron más de dos toneladas de pirotecnia como parte del operativo “Navidad en Orden”.
“El año pasado por primera vez se creó el operativo para estar cerca de la ciudadanía y puedan realizar denuncias en cuanto a cualquier giro comercial, lo que corresponda a las medidas de seguridad, la venta ilegal de pirotecnia, entre otros temas”, agregó.
Al viernes 15 de diciembre de 2023, la administración municipal había reportado el decomiso de 700 kilogramos de pirotecnia, el más reciente, uno de 500 kilos guardados en un comercio del Fraccionamiento El Soler.
RIESGOS POR USO DE PIROTECNIA
La Nochebuena y el Año Nuevo son los días en que más se registra el uso de pirotecnia, explosivos o incluso de productos permitidos en el reglamento y aunque no generan altos niveles de ruido, si representan un riesgo para la integridad de la población.
Rafael Carrillo Venegas, director de Bomberos Tijuana, consideró necesario que la población tome conciencia del manejo irresponsable de la pirotecnia, aunque sea de los tipos permitidos por reglamento, y de supervisar a los menores de edad en todo momento.
“Definitivamente hay pirotecnia prácticamente inofensiva para la salud o para el riesgo de lesiones, pero no para los incendios. La luz de bengala, los famosos garbanzos, pueden provocar incendios y más si hay fuga de gas presente. Podemos provocar un incendio o una explosión”, comentó.
Carrillo Venegas, puso como ejemplo otros productos a base de pólvora que por su confección son un peligro, como las varillas o “chifladores” que no toman vuelo o terminan dentro de una vivienda.
Pero alertó particularmente de aquellos explosivos que son un peligro mayor, aquellos que son populares precisamente por su potencia altamente concentrada.
“El cuete Cherry Bomb es el que más causa daños en las personas. Desde quemaduras hasta amputación de extremidades o de dedos. Desde el momento en que está confinada la pólvora o el material que se va a quemar, desde ahí se vuelve un riesgo y más si al
momento de prenderlo o quemar la mecha no llega a detonar. Puede llegar a detonar segundos después y a veces la persona se confía, lo agarra y es cuando vienen las lesiones”, concluyó.
