Tijuana.- La zoofilia en Baja California no amerita prisión preventiva y los responsables reciben penas que no rebasan los tres años.
En Baja California son pocos los casos que se han detectado y judicializado, pero en el corto plazo se ve necesario que haya más acciones de prevención y modificaciones al código penal Estatal, con el fin de promover sanciones más graves.
El Sol de Tijuana habló con Ilse Carolina Vázquez, integrante del área de litigio estratégico de Abogados Animalistas, quien ofreció más detalles sobre el estado actual de este delito en Baja California.
¿Qué es la zoofilia?
Como tal en el código penal no viene establecido un concepto de la zoofilia, pero nosotros los animalistas lo entendemos como cualquier acción en el que se comprometan animales, busque o la intención sea una satisfacción sexual de la persona consciente que esté utilizando al animalito. Es un término más psicológico, psiquiátrico, de hecho.
¿En el código penal cómo está?
En el código penal no está una conceptualización, solamente dice al que intencionalmente realice algunos de los siguientes actos, en artículo 342 del código penal.
Hay seis fracciones, en la segunda es donde se habla que se interpondrán de tres meses a dos años de prisión al que realice los siguientes actos que es tortura, sadismo, zoofilia o cualquier acción análoga que implique sufrimiento del animal.
¿Cuál es el diagnóstico que tienen ustedes?
Denuncias por zoofilia a nivel estado hay unos cinco máximo, cuatro. Recientemente fueron estas dos denuncias que se viralizaron en internet.
El delito de maltrato animal por el cual están investigando estos actos de zoofilia, se puede iniciar por querella, es decir, que la persona dueña del animalito sea quien ponga la denuncia o de oficio, cuando no exista esta persona dueña, que es lo que existe con los animales en situación de calle.
En Mexicali son dos asuntos, uno es donde se identifica a tres menores de edad, en un rango de 10 a 13 años, estos niños de acuerdo a los agentes de la Policía Ministerial de la Fiscalía General del Estado, mediante redes advierten que se están realizando actos zoofílicos.
Se inicia una investigación por parte del área de inteligencia, se identifica esta dirección del IP y da con un domicilio en Mexicali, atienden, solicitan la orden de cateo los policías ministeriales y es donde encuentran que los presuntos responsables son tres menores de edad y se les decomisa sus aparatos electrónicos.
Existe este shock de que son niños muy menores, por lo tanto, no hay sanción ni siquiera privativa de la libertad o una sanción severa, a lo mucho terapia psicológica o servicio a la comunidad.
ACCEDE A NUESTRA EDICIÓN DIGITAL ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!
¿Como colectivo a cuántas carpetas de investigación le están dando seguimiento y también, es muy difícil judicializar este tipo de casos?
Otro asunto que tenemos como colectivo es el de una persona no identificada, que ya le tumbaron la cuenta de Facebook. Hasta ahorita no se ha podido localizar el IP, primero en Mexicali y luego en Los Ángeles.
No es difícil judicializarlo, siempre y cuando se encuentre la evidencia sustancial para poderla vincular con la persona que está realizando la comisión de este delito.
Ojo no va a quedar privada de la libertad, ese es el tema más importante, porque uno piensa que ya porque se judicializa queda privado de la libertad, pero son cosas muy distintas.
Como este es un delito que lamentablemente la máxima son de dos años de prisión, es un delito que no amerita prisión preventiva oficiosa por la misma pena.
Si esta persona acredita tener un domicilio fijo, mucho menos se le va a privar de la libertad. Sería una persona que estaría en libertad sometida a proceso.
¿Ven que es necesario que haya penas más duras?
No es posible para nosotros, que nuestro código penal, que la legislación que se encarga de sancionar todos estos hechos de maltrato y de crueldad hacia animales sea la misma penalidad, para alguien que cause muerte a un animal, que sea la misma penalidad para alguien que tortura, para alguien que comete este tipo de actos. Que sea la misma penalidad para alguien que mutile animales, que sea la misma multa para alguien que lesione animales.
Recientemente hubo el caso de un Husky que fue lesionado con un machete.
No es posible que a esta persona que cometió este acto del Husky, se le vaya a juzgar con la misma penalidad a una persona que atropelló a un perrito o alguien que violó a un perrito, a una persona que ocasionó un acto de tortura y sadismo.
No es posible, el mismo código no contempla una diferenciación como los otros delitos sí los contemplan en el caso de los humanos, pero no en el derecho animal, además de que los legisladores no han tenido el compromiso, no han tenido el estudio, la empatía para poder diferenciar y sancionar distinto tanto la muerte de un animal como las lesiones de un animal.
Los animales que son víctima de zoofilia, ¿tienen que ser sacrificados?
Probablemente tenga unos rasgos traumáticos al respecto, no van a ser unos animalitos que se le va a poder incorporar con otros seres humanos, mucho menos si ha sufrido violencia de por medio, que se le ha sometido a estos actos crueles e inhumanos.
No es el mismo tratamiento porque el animalito tiene secuelas psicológicas, tiene traumas, miedos, una desconfianza hacia el ser humano, mas, si fue un hombre el que cometió estos hechos, el animal va a reaccionar con timidez, rechazo, incluso agresivamente.
En el caso de los animalitos que reaccionan con un poquito de timidez, a estos animales se les puede reinsertar con mucho amor, mucha paciencia y mucho cariño de manera progresivamente y va a tener una vida normal.
Si es un animalito que ha adoptado conductas agresivas productos de estos hechos de agresiones, zoofílicos, va a ser un animalito que muy difícilmente se le podrá reinsertar a la convivencia más si representa un daño al ser humano.
Si este perrito ha tenido antecedentes de agresiones, de mordidas, de eventos violentos, lamentablemente para este tipo de perritos víctimas de zoofilia, como cualquier otro perrito, que son parte de jauría que lesionan o matan a personas.
Este tipo de perritos y nos duele decirlo como activistas porque nosotros velamos por la seguridad, por la vida de un animal, sin embargo, como representan un gran riesgo , estos perritos lamentablemente se les tiene que aplicar eutanasia, porque es imposible que este tipo de perrito con conductas tan violentas y agresivas se puedan reinsertar a la sociedad.
No se les puede aislar tampoco, pero tampoco se les puede permitir que sigan en la sociedad, exponiéndolos a que sigan haciendo un daño. Como último fin es la eutanasia.
¿Algo que te gustaría agregar?
Como colectivo de Abogados Animalistas México estamos trabajando para que en el Congreso del estado se reforme el artículo 342 del código penal.
Seguimos trabajando para que se aumenten las penalidades en contra del maltrato animal, de la crueldad animal para que se especifique dentro de cada conducta de crueldad animal la diferencia de punibilidad que debe de existir, de acuerdo a cada tipo penal que se legisle.
También trabajamos para que en el código penal se agregue el tema de los veterinarios que realizan malas praxis en contra de los animalitos, que es uno de los hechos que más acontece, que los veterinarios tratan negligentemente a los animalitos y le provocan la muerte como última instancia, estamos trabajando que se agregue como un tipo de crueldad o maltrato animal la negligencia por veterinarios.
Estamos trabajando para que en últimas instancias se revoqué del código penal, en el 342, el tema de que se excluya de maltrato animal las corridas de toros y las peleas de gallos. Estamos trabajando para que se protejan y se velen a todos los animalitos y seres vivos.
