Tijuana. - La buena calidad de la leche materna dependerá del seguimiento de una dieta basada en el plato del buen comer, expresó la nutrióloga Jessica Hamarat Lugo Reynaga, misma que tendrá un beneficio directo sobre la alimentación del bebé al momento de empezar la lactancia materna.
En el marco de la semana nacional de la lactancia materna, la también jefa de dietología del Hospital General de Tijuana (HGT), explicó que si bien no hay una dieta universal que la mujer embarazada deba seguir durante la gestación y periodo de lactancia materna, la recomendación generalizada es una base en alimentación balanceada.
El plato del buen comer se compone de alimentos de los tres grupos de alimentos saludables, verduras y frutas, cereales y tubérculos, leguminosas y proteína de origen animal, que en su combinación y variación proporcionan a la persona el aporte de energía y nutrientes necesarios para la actividad diaria y sano desarrollo de cada etapa de la vida.
“Como para toda la población, en el caso de la mujer embarazada, se deben evitar ingestas abundantes de grasas, azucares refinadas, comidas procesadas” mencionó, además que el consumo de pescados y mariscos crudos no está recomendado, así como los alimentos de preparación y venta en la vía publica.
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En el caso de los productos alimentarios que se venden en la vía pública, el riesgo está relacionado con la probabilidad de falta de higiene al prepararlos, el contacto con contaminantes ambientales, lo que podría causarle a la mujer embarazada problemas gastrointestinales incluso mayores que a una persona no embarazada.
“El riesgo de transmitirle al bebé cualquier bacteria que se consuma en un alimento contaminado es muy elevado”, precisó Lugo Reynaga, por lo que exhortó a las mujeres embarazadas a evitar estos alimentos.