Tijuana.- Al principio de la pandemia hubo cinco sacerdotes de la iglesia católica voluntarios, a los que la Secretaría de Salud permitió el ingreso a las áreas Covid de los hospitales, pero a nueve meses de la pandemia, el acceso está completamente restringido.
Los sacerdotes, al igual que los pastores, tenían como objetivo orar por los enfermos y los primeros, ungirlos, acercando así uno de los sacramentos de la iglesia católica.
Actualmente, el padre Jorge Aguayo Carmona, secretario del Arzobispado, señala que las medidas son estrictas, y el ingreso en los hospitales públicos es casi imposible.
“Es más difícil entrar en los hospitales públicos que en los particulares, ahí han ido más los padres a ungir a los enfermos, ya el área Covid está totalmente restringida”, comentó.
Debido al avance de la pandemia, se determinó detener el ingreso de los padres y/o pastores por el riesgo de contagio para ellos, señaló el sacerdote.
Sin embargo, al considerar el cuidado de los enfermos como uno de sus encargos, igual que la unción y absolución, los esfuerzos de la iglesia continuaron.
“Hemos estado llevando la custodia de las especies consagradas, ya que no podemos entrar, pero sí llevar la presencia de Jesús y la eucaristía alrededor de los hospitales”, mencionó.
A raíz del difícil acceso a los hospitales, la iglesia tomó la decisión de hacer una visita diaria a algunos de los hospitales Covid-19 para realizar la bendición y orar.
“Ahí nos encomendamos a Dios Padre para que las almas que Dios disponía llevarse ese día no se fueran sin la bendición de nuestro Señor”, dijo Aguayo Carmona.
De igual manera, durante la primera etapa del proyecto Espacio Digital, de mayo a agosto, mediante las misas online se pedía por los pacientes hospitalizados, los que estaban en casa luchando contra el virus, los que ya habían fallecido y por la pronta “victoria” sobre el virus, agregó.
En la segunda etapa del Espacio Digital, después de la decisión de las autoridades de salud de suspender actividades religiosas en los templos, la iglesia católica, a través del medio digital, estableció los días lunes, de 8:00 a 9:00 horas, para pedir por los enfermos de Covid-19.
El padre Jorge manifestó que en esta cápsula también oran por los demás enfermos, quienes a raíz de la pandemia por Covid-19 han visto complicaciones para atender sus padecimientos en los hospitales públicos.
La Secretaria de Salud consultada sobre las necesidades espirituales de los pacientes con Covid-19, manifestó que de momento lo mejor es hacerlo desde casa, orando por lo familiares, los enfermos en general y el personal de salud, para no exponer a nadie más, sobre todo si no se tiene el entrenamiento adecuado para entrar y salir de un área Covid.