Tijuana.- Entre los meses de enero y marzo se han registrado 65 deslizamientos de tierra en Tijuana, de acuerdo con la Dirección Municipal de Protección Civil. De esa cifra, 46 ocurrieron en el mes de enero, 10 en febrero y nueve durante el mes de marzo.
Sin embargo, este número no se refiere solamente a deslizamientos como el registrado en el fraccionamiento La Sierra, que tuvo como consecuencia la caída de dos edificios. O el deslave en El Cañón del Matadero en la carretera Tijuana-Rosarito, en donde fue necesario el cierre de carriles para evitar vibraciones que aceleren el deslave.
Bernardo Villegas, encargado de despacho de Protección Civil Municipal (PCM), brindó una entrevista a El Sol de Tijuana para hablar de las condiciones actuales de la ciudad en el tema de los deslizamientos de tierra.
¿Qué tipo de deslizamientos son los que se han registrado en la ciudad durante este 2023?
Es importante comentar que los deslizamientos de masas como en el caso de La Sierra, de Herradura Sur y esos lugares, han sido pocos. Sin embargo, la cantidad de 46 son derrumbes que han generado caída de rocas sobre avenidas y sobre estos socavones que se han generado en toda la ciudad. Prácticamente son los reportes que han entrado al número de emergencias que han sido relacionados con caída de material derrumbe y deslizamiento, están englobados todos los eventos.
¿Qué ha provocado que este año sea una cifra elevada?
En este año tuvimos la caída por la precipitación de bastante agua comparada con el 2022, que fue un periodo de lluvia fueron aproximadamente máximo dos pulgadas y media de agua. Este año en esta temporada cayeron alrededor de 10 pulgadas y media de agua, prácticamente fue como tres veces más o cuatro veces más de lluvia, eso fue lo que generó tantas incidencias como caídas o derrumbes y los deslizamientos que hemos tenido son los que han generado afectaciones a viviendas.
Los cortes a veces no adecuados de los terrenos ha sido un factor muy desencadenante de cierta manera, la filtración de agua también sobre estos terrenos que la cantidad de agua que cayó generó que se saturara el suelo y nos diera problemas.
Los cortes en las casas en laderas, sobre todo con la autoconstrucción ha generado que tengamos este tipo de caídas de bardas y todos estos eventos.
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Concluyendo la temporada de lluvias ¿reduciría el número de movimientos?
Hay todavía factores pero en caso de la humedad normalmente el tipo de suelo que se tiene en algunas zonas tiende a secarse y se expande, esto genera a veces también que continúe en algunos eventos de este tipo.
¿Cuántas zonas tienen registradas como de alto riesgo?
Hasta el momento tenemos 46 ubicadas que son las que ya han presentado afectaciones a más de tres a cinco viviendas y más viviendas.
En el caso de las de las zonas de inundaciones las nueve delegaciones tienen estas zonas, las han estado monitoreando año con año, pero sí hay bastantes lugares donde todavía hay riesgo de inundación, aunque no se han visto afectadas directamente.
¿Qué características tienen las viviendas afectadas?
Muchas de ellas son construcciones de concreto, la mayoría o algunas de ellas han sido edificadas en zonas de pendientes donde hay una ladera involucrada, y en estas han sido también algunas zonas sobre todo con construcciones de más de dos pisos.
¿Los habitantes han abandonado estas zonas de alto riesgo?
Las que tenemos identificados en algunas sí han abandonado, no en todas. Desafortunadamente la gente una vez que la ladera ya se ha dejado de mover, regresa a la vivienda o simplemente no se sale.
Todavía en algunas zonas sí tienen personas, como en el caso del Aguaje de la Tuna. El reporte se realizó el 30 de enero, a la fecha creo que todavía hay como ocho familias viviendo en el lugar, no en el punto donde está exactamente el lanzamiento, pero están engomadas dentro del polígono deslizamiento. Se ha hecho acercamiento con ellos, se les ha comentado sobre todo del riesgo que se tiene en que si se sigue moviendo la ladera podría tener una afectación, sin embargo, la gente no quiere salirse.
¿Qué peligro hay en estas zonas de riesgo?
El peligro puede ser un colapso de una estructura, caída de material, si bien una ladera presenta señales de deslizamientos, sobre todo como son unas grietas de tensión en la parte alta o movimiento de grietas sobre la estructura, el riesgo puede hacer que pueda ser súbito, que un deslizamiento pueda presentarse a subir, que la masa se pueda desplazar súbitamente es uno de los riesgos principales.
Como medidas preventivas en estas zonas se solicita inmediatamente cuando hay un deslizamiento el corte de suministro de agua, para evitar que se acelere este movimiento, y también se solicita el corte de suministro de energía para evitar también algún incendio o un corto.
