Juan Miguel Hernández

Tijuana.- El presidente municipal de Tijuana, Juan Manuel Gastélum Buenrostro, hizo un llamado al gobierno federal para que asuma de manera inmediata la atención y supervisión de la caravana migrante.

El primer edil tijuanense afirmó que es necesaria la intervención de la administración que encabeza Andrés Manuel López Obrador para hacer frente a la crisis migratoria que enfrenta Tijuana.

“Deben de hacerse cargo de la problemática que ellos mismos ocasionaron. Tiene que solucionar esta problemática; de acuerdo a la ley, a la Constitución, el tema migratorio le corresponde a la autoridad federal y a los estados. El ayuntamiento, de manera subsidiaria, colabora, porque son seres humanos; no podemos negarnos”, expresó.

Gastélum Buenrostro también se refirió a las declaraciones de la secretaria de gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien declaró que la situación migratoria en Tijuana se había resuelto en un plazo de cinco días.

“Le han informado mal. Como buena dama, le tocan cuerdas sentimentales y le dicen ya quedó; ella gustosa da a conocer la noticia. Quienes le informan, (que) le digan la verdad. No importa ya lo (que) dijo; la cuestión es qué hay que trabajar y que se solucione”, manifestó.

El alcalde urgió la construcción de una estación migratoria en Tijuana que atienda y resuelva el flujo migratorio que hay en la ciudad.

“El problema es que si el gobierno federal no pone límites en la migración, no para que no entren, sino pone orden en el ingreso, para saber quién es, en qué se le puede ayudar, si está enfermo o tiene discapacidad, y con ello organizarnos mejor”, comentó.

El munícipe aclaró que los 100 millones de pesos que solicitó a la federación no serían para el Ayuntamiento de Tijuana, sino para atender directamente a la caravana migrante.

“Primero los tijuanenses. No voy a destinar recursos de la hacienda pública para satisfacer, comprar camas, cuando tengo más tijuanenses necesitados de camas. Tenemos problemas de seguridad, hemos bajado en rubros, pero en homicidios no logramos el objetivo todavía previsto”, apuntó.

El presidente municipal aseguró que la permanencia de 400 personas afuera de la unidad deportiva Benito Juárez ha afectado a niños y vecinos que residen en la Zona Norte de la ciudad.

“Hay 400 personas que no podemos mover; no podemos llegar ni decirles ‘muévanse’, porque derechos humanos se incomodan; INAMI dice que no es el trato correcto. ¿Y los derechos de los niños al ir al escuela, a caminar por las calles? Han tenido que pisar heces fecales”, exclamó.

De igual forma, respondió a las declaraciones hechas por el delegado en Baja California del gobierno federal, Jaime Bonilla Valdés, quien aseguró que no se le dará un solo peso al ayuntamiento y al Gobierno del Estado para atender la situación migratoria.

“Con el señor Bonilla, excelente oportunidad que se tiene de lograr cosas para Tijuana; él, como delegado excelente, su cercanía con el presidente. No queremos dinero; queremos acciones concretas. Estoy seguro (de) que él habrá de hacerlo y no tengo por qué dudar”, concluyó.