Tijuana.- El puente de tierra que se construye en la canalización del Río Tijuana como una solución temporal para aminorar los problemas de tránsito que se generan mientras se reconstruye el puente Los Olivos, está lejos de quedar concluido en los próximos días como fue anunciado originalmente.
El pasado jueves 9 de junio, el titular de la Secretaría de Desarrollo Territorial, Urbano y Ambiental, Miguel Ángel Bujanda Ruiz, dijo que “ya se están instalando los tubos para la desviación del agua, en 10 días, más o menos, ya tendremos esté terraplén”.
En ese momento, la Secretaría a su cargo reportaba un 40% en el avance de los trabajos anunciados ya hace más de 10 días con el plan de terminar en aproximadamente dos semanas.
En un recorrido de El Sol de Tijuana realizado la tarde de este viernes se pudo observar una máquina aplanando tierra y los tubos por donde pasará el agua del canal, sin embargo, la otra mitad del puente a base de tierra aún está inconclusa.
“La misma dirección de obras públicas del ayuntamiento va a poner la capa asfáltica”, declaró el secretario, algo que también le falta a la obra que deberá ser utilizada sólo para el tránsito de vehículos ligeros.
El terraplén, construido como vía alterna a un costado del puente Los Olivos, tendrá un costo de 500 a 700 mil pesos y tiene la finalidad de disminuir el tránsito generado por la reconstrucción del puente Los Olivos durante los próximos cinco meses, explicó la alcaldesa de Tijuana, Monserrat Caballero, el pasado martes 7 de junio.
Respecto a los avances en la reconstrucción del puente, Bujanda Ruiz dijo esta semana que ya empezó el reforzamiento de los pilares y “las vigas vienen en camino de otras partes del país, pero van en tiempo y forma”.
El puente lleva un avance de 20% y se terminará dentro de cinco meses como está proyectado, afirmó.
El puente fue cerrado a la circulación tras el sismo de 4.7 registrado el pasado 14 de abril porque el movimiento de tierra dejó al descubierto los daños estructurales, como fue en la separación de las juntas en la parte superior.
Desde hace casi un año, el pasado 8 de julio del 2021, un dictamen preliminar de la empresa Euro Estudios S.A de C.V., determinó que el puente tenía que ser cerrado a la circulación de los vehículos pesados al menos hasta que hubiera estudios a profundidad.
La administración del XXIII Ayuntamiento de Tijuana envió un comunicado sobre las nuevas medidas y la colocación de señalamientos, sin que esto se llevará a cabo.
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El pasado mes de noviembre, Euro Estudios entregó el estudio EE21023, que contiene la serie de anomalías y fallas estructurales de la obra construida en 2004 por la empresa Urbanizadora Roma, así como las conclusiones y medidas que era necesario tomar.
“Restringir de forma inmediata el paso de vehículos de transporte pesado sobre el puente.
Valorar la posibilidad de cerrar el puente a la circulación, hasta que este sea rehabilitado y cuente con la resistencia necesaria conforme a la reglamentación, lo anterior con el fin de evitar accidentes por falla del puente”, dice el dictamen.
El ingeniero experto en estructuras y miembro del Comité de Puentes Peatonales y Vehiculares de Tijuana, César Ulises López, dijo que al demoler el puente encontraron fallas de la construcción más graves que las detectadas en el dictamen, aunque en la mayoría son similares.
“Hubieran dicho cierren a toda circulación porque está en un en un proceso inminente de colapso”, señaló.
“El problema es que no hubiera sido un colapso lento, sino qué iba a caer súbitamente”, añadió.
Como ejemplo, expuso el puente que colapsó en la ciudad Génova, Italia, en el 2016, construido por conocidas empresas de Europa.
“La ciudad corrió con suerte”, recalcó sobre el caso de Tijuana.
Sin mencionar el nombre, dijo que la empresa constructora del puente de Los Olivos “se quemó”.
“Hubo malas prácticas constructivas y con materiales de mala calidad”, apuntó
Señaló que el concreto no estaba totalmente hermético y eso hizo que el agua se filtrara, provocando corrosión de las varillas.
Comentó que sobre la mesa hubo diversas propuestas para reparar el puente, entre ellas poner unas vigas, pero solo eran parches y no una solución permanente.
“No puedes dar una aspirina si no sabes lo que tiene realmente, hay muchos ingenieros que tienen ese estilo”, señaló.
Explicó que aunque hubiera sido un costo más bajo, la vialidad habría seguido funcionando y la tragedia estaría acechando, “porque el puente iba a seguir enfermo”.
Reconoció la medida tomada por las autoridades municipales de cerrar el puente y repararlo de acuerdo con la normatividad para brindar seguridad a los vehículos que circulan, que son alrededor de dos mil en promedio cada hora.
