Las fuertes lluvias que se han registrado en las últimas 48 horas provocaron el desbordamiento del río Pichucalco, anegando la carretera Villahermosa-Teapa, además de la de Teapa-Pichucalco.
Esto ocasionó que la zona de La Sierra de Tabasco quedara incomunicada por el agua que invadió ambas carreteras.
Desde muy temprano, personal de Protección Civil estatal y municipal se dio a la tarea de verificar las anegaciones que ha provocado el desbordamiento del río en algunas viviendas para apoyar a sus moradores y trasladarlos a lugares seguros, en tanto las autoridades viales establecieron operativos para desviar el tráfico vehicular hacia otras vías de comunicación
Por otra parte, y aunque se tenía un estimado de lluvias mayor a los 250 milímetros a causa del frente frío número seis, no se alcanzaron los rangos de precipitación previstos por el Sistema Meteorológico Nacional (SMN), informó el Instituto de Protección Civil del estado (IPC).
Los registros máximos fueron de 62 milímetros en el municipio de Centro, y de 70 en Macuspana, que se califican como lluvias muy fuertes, detalló el director de Gestión Integral de Riesgos, Gilberto Rubén Segovia Quintero, quien indicó que hubo encharcamientos en colonias que se inundan con facilidad y árboles derribados el viento.
Señaló que en Paraíso, el Centro Regional Costa, a cargo de Francisco Javier Collado, atendió a siete familias que resultaron afectadas por el desbordamiento de la laguna Las Flores, y los habitantes de dos casas fueron trasladados a un refugio temporal en la Iglesia Católica San Sebastián, ubicada en esa misma zona.
En tanto, en el poblado C-11, del municipio de Cárdenas, se reportaron 160 familias (660 personas) afectadas por encharcamientos que alcanzaron casi 80 centímetros de altura, por lo menos en tres calles, sin que hasta la tarde/noche el agua hubiera entrado a las viviendas.
Segovia Quintero reportó que, de acuerdo al Sistema de Control Hidrológico, el comportamiento de los ríos que cruzan por los municipios de Tabasco se ha mantenido por debajo de sus niveles de afectación, y mantienen capacidad de regulación en sus respectivas estaciones. La misma situación prevalece con las presas del Alto Grijalva, las cuales han estado desfogando alrededor de 400 metros cúbicos por segundo.
Observó que el río más crecido es el de la Sierra, pero aún está muy lejos de afectar a comunidades aledañas. “Ninguno está por arriba de su nivel máximo, pero recordemos que hay algunos de respuesta rápida en Teapa, Tacotalpa, Jalapa y Macuspana, que pueden aumentar varios metros en cortos periodos de tiempo”, advirtió.
Gilberto Segovia mencionó que, en Jonuta, el Centro Regional Frontera Sur, instaló una bomba de seis pulgadas para desalojar el agua alojada en la cabecera municipal.
En la comunidad José María Morelos, personal operativo del Centro Regional Sierra construyó un dique para contener un socavón.
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