El proyecto del Corredor Agua Caliente está por cumplir cuatro meses y la plantilla de unidades se mantiene igual por un retraso en la entrega de camiones, mientras que los taxis rojos con negro continúan circulando en la ruta de la que iban a ser removidos.
En una primera etapa comenzaron a circular 31 camiones: 16 negros y 15 de la Ruta Violeta por el trayecto que corre desde La Presa Abelardo L. Rodríguez hasta la Zona Centro, atravesando los bulevares Gustavo Díaz Ordaz y Agua Caliente.
El proyecto arrancó en noviembre del año pasado y a la fecha los usuarios de la ruta continúan adaptándose, utilizando los dos sistemas de transporte: taxis y camiones.
Luz usa el transporte casi todos los días y mencionó que elige dependiendo “el que pase primero”.
Mientras que otras personas, como Mayra Gutiérrez, prefieren usar las nuevas unidades para evitar malas experiencias.
“Antes de que salieran los (camiones) negros sí los agarraba (a los taxis), pero la verdad tienen muy mal servicio”, dijo.
Mayra Gutiérrez añadió que utiliza los camiones una vez al día, de lunes a sábado, y el único inconveniente o hasta el momento es la suciedad en algunas unidades y la falta de sitios para recargar su tarjeta de pago.
Para facilitar el pago, el Instituto Movilidad Sustentable (Imos), habilitó el pago mediante tarjeta electrónica y en una primera etapa regaló alrededor de 10 mil plásticos, con 150 pesos de saldo.
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Para recargar las tarjetas serían colocadas máquinas en diferentes puntos de la ciudad, pero esa instalación no ha sido anunciada por las autoridades.
También fue habilitada la aplicación móvil “Stop Bus” para conocer horarios y rutas de los autobuses y recargar las tarjetas, pero tampoco funciona para todas las personas.
Mayra Gutiérrez recibió una tarjeta pero no ha podido recargarla porque cuenta un celular iPhone y la aplicación aún no ha está habilitada para el sistema operativo IOS, así que tiene que pagar en efectivo y se ve obligada a llevar siempre el monto exacto.
También como parte del proyecto Corredor Agua Caliente y de las acciones de movilidad en el estado, fue incorporada la Ruta Violeta que da servicio gratuito a mujeres y menores de edad.
Gutiérrez también es usuaria de esta ruta y es la única con la que hasta el momento no ha tenido inconvenientes.
Jorge Gutiérrez Topete, titular del Imos, declaró el día del arranque del proyecto en la parada de la Torre de Aguacaliente, que en marzo de este año estarían circulando 110 unidades.
TAXIS ROJOS
Con el ingreso de los camiones, las urban Rojo y Negro que han explotado la concesión de la ruta dejarían de operar paulatinamente en el bulevar y sus conductores serían enviados a otras rutas de la ciudad donde hay demanda, según lo anunciado por el gobierno estatal.
Para el 31 de diciembre pasado estaba contemplado que el 80% de los taxis dejarán de circular tras el vencimiento de sus permisos, pero ante la demora en la entrega de camiones, el gobierno estatal retrasó su salida y no ha dado nueva fecha.
“Evidentemente no podemos sacar a los taxis rojos y dejar a la gente sin transporte. En la entrada de los camiones se irán haciendo las nuevas rutas o las rutas alternas para estos taxis”, declaró a principios del mes de enero la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda.
Mientras tanto, los conductores de taxis rojo con negro siguen a la expectativa de saber si serán removidos o no.
“En eso estamos, que nos quieren mover, pero por la sobresaturación que saquen a los que no deben estar y nos dejen a nosotros como estamos”, mencionó Félix Baltazar, checador en la zona centro de la ciudad.
Añadió que por ahora, con el ingreso de los nuevos camiones, el número de usuarios que toman esta ruta no ha disminuido, sólo cuando se acumula un gran número de personas esperando por un taxi.
“El grueso de la gente se va en el taxi por rapidez, por facilidad, porque se mueve más rápido que un camión (...) El taxi sale lleno y llega rápido”, dijo Baltazar Sanabria.
Isabel Espinoza Rivera, usuaria de los taxis rojo con negro toma el transporte entre tres y cuatro veces por semana y dijo que lo prefiere por la frecuencia con la que circulan.
Agregó que no ha utilizado los nuevos camiones por la facilidad que existe para elegir un taxi y la rapidez con que llega a su destino.
Además, sugirió a las autoridades considerar las distintas necesidades de los usuarios antes de tomar una decisión y remover a los taxis.
“Yo no veo factible que se disminuya, vamos a necesitarlo (...) Que se revise qué es lo mejor para las personas”, pidió.
