A pesar de cuadruplicar en los últimos cuatro años la capacidad de atención en la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), ésta se encuentra rebasada ante “un incremento sin precedentes de solicitudes de asilo”, dijo Filippo Grandi, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.
Durante una visita a las instalaciones de la Comar en Tijuana, Filippo Grandi pidió al gobierno de México “aumentar de manera urgente el presupuesto de la Comar”.
Destacó que Tijuana alberga a personas que no tienen acceso al asilo en Estados Unidos, “por lo que es importante ofrecer alternativas migratorias, para aquellas personas que no requieren protección como refugiados”.
Como ejemplo, comentó el caso de los haitianos, para quienes será muy difícil lograr un reconocimiento como refugiados, “porque no vienen de su país de origen, vienen de Chile y Brasil, eso lo considera como migrantes pero no como refugiados”, dijo.
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“Hemos sugerido al gobierno de México, establecer alternativas migratorias, otras formas de acogida y de integración en el país, sin sobrecargar el sistema de asilo que está muy saturado'', añadió.
Por otro lado, el coordinador general de la Comar, Andrés Ramírez, declaró que los haitianos representan casi 50% de las atenciones en la Comar, aunque no cumplan con el perfil de refugiado.
“Este año tenemos 45 mil haitianos y si agregamos a los chilenos y brasileños, que son hijos de haitianos, ya tenemos el número de 52 mil. A la fecha del 16 de noviembre, están cerca a la mitad del total de solicitantes en la Comar”, precisó.
Si bien no cumplen como refugiados, tampoco se les “puede retornar a su país de origen por la situación caótica que se vive, colapsó el parlamento, hubo un terremoto, un huracán, sería de los más inhumano mandar a estás personas a Haití”, explicó Andrés Ramírez.
Aseguró que el gobierno de México emitirá en los próximos días un decreto para ofrecer alternativas a los migrantes que no cumplen con el perfil de refugiados para que puedan tramitar su estancia legal en el país como migrantes, y tener acceso a los servicios públicos sin necesidad que colapse la Comar.
