Crisstian Villicaña
Tijuana.- El director de la preparatoria federal Lázaro Cárdenas, José Cruz Holguín Ruiz, habló sobre los recursos que ha dejado de percibir esa institución educativa y, al mismo tiempo, el retiro del capital generado por la propia escuela, el cual es necesario para satisfacer las necesidades de los estudiantes y hacer mejoras en el plantel.
“En la última parte de está administración pasada, nos cancelaron subsidios, que eran recursos para poder hacer crecer materialmente la escuela, mejorar instalaciones, equipamiento también. De agosto para acá, tomaron la determinación de que todos los recursos que aquí se generan con algún servicio que prestamos en la escuela y son recursos propios que antes se aplicaban para el gasto corriente de la escuela, ahora se los llevan, no se quedan aquí; tenemos que depositarlos en el banco en una cuenta que es de la tesorería de la federación”.
El año pasado, la preparatoria recibió recursos por un monto de 200 mil pesos, lo cual, dijo el director, no es la gran cantidad, pero si de ayuda. “Creo que generamos más recursos nosotros mismos que lo que recibíamos de subsidio y aquí incluyó a los padres de familia, porque son la parte más importante; es el pilar más solido en cuestión de recursos que nos sostiene como institución. La mayor parte de recursos proviene de los padres de familia”, subrayó.
La respuesta que le dieron a la preparatoria acerca de los recursos retirados, así como de tener que depositar lo que la escuela genera, fue una orden de la Secretaría de Hacienda. “Ojalá que este nuevo gobierno revise ese asunto. Nosotros vamos a estar insistiendo haciendo las gestiones, acudiendo a las estancias correspondientes del nuevo gobierno. No solamente para que se nos regresen los recursos que aquí se generan para el gasto propio, sino también le asignen a la preparatoria un presupuesto, un subsidio, para mejorar la infraestructura, el equipamiento y para resolver las necesidades, porque es responsabilidad del gobierno federal, y todo se esta dejando en manos y bolsillos de los padres de familia”, concluyó.