Tijuana.- Para algunos comerciantes de Tijuana se ha vuelto complicado conseguir un local comercial a consecuencia de la alta demanda especialmente en las principales avenidas de la llamada “zona dorada”, la más urbanizada y cercana a la frontera internacional.
Laura Paola Olascoaga Díaz, presidenta de la Asociación de Profesionales Inmobiliarios de Tijuana (APIT), dice que es más fácil encontrar espacios en plazas comerciales, pero no parece una opción para todos.
“El primer piso y segundo piso los llegamos a encontrar en algunas plazas, pero la gente está buscando a nivel de calle porque siempre son los más visitados, tienen más presencia, son más vistos”, explicó.
El aumento en la demanda de espacios comerciales es notorio en zonas como la colonia Madero, popularmente conocida como “la Cacho”.
La presidenta de la APIT destacó que, aunque originalmente es una zona residencial, con el transcurso de los años ha cambiado a uso de suelo comercial y por eso hay viviendas que se transformaron en negocios, particularmente cafeterías.
Pero también hay varios profesionistas que actualmente demandan establecimientos en áreas como Zona río, bulevar Insurgentes y Zona Centro.
“Hay demanda de los centros médicos y abogados en esas zonas o también abarca diferentes lugares de la ciudad. Los abogados quieren estar cerca de los juzgados para la facilidad del traslado, sabemos que Tijuana no es una ciudad donde puedas trasladarte tan fácilmente”, comentó.
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Además, con el auge del turismo médico, los prestadores de estos servicios buscan cerca de la línea internacional con San Ysidro y la garita Chaparral.
“Viene mucha gente de Estados Unidos a atenderse, pues buscan mucho en el área cercana a las garitas”, dijo Olascoaga Díaz.
La presidenta de la APIT indicó que para ese sector es complicado conseguir espacios en avenidas principales y los especialistas inmobiliarios les recomiendan buscar en plazas o condominios que actualmente están en proceso de construcción.
“En el segundo piso sí hay. Por ejemplo, el médico, ellos no necesariamente tienen que estar a nivel de calle, porque ya traen sus clientes y esos mismos clientes muchas veces le recomiendan a otros”, opinó.
Laura Olascoaga comentó que las cafeterías son uno de los negocios que más buscan espacios comerciales, y aseguró que la colonia Cacho es el polígono con mayor presencia de este giro.
“Ahorita hay un boom en todo lo que son cafeterías. Hay mucha gente queriendo poner cafeterías porque se está volviendo parte de la cultura del mexicano reunirse en los cafés a tomarse un cafecito, estar con los amigos, ya sea para negocio o para un rato por diversión”, expresó.
Michael Barrera es una comerciante que está en los dos casos: por un lado, busca un espacio para rentar y por el otro forma parte del mercado de las cafeterías.
Comentó que actualmente es complicado conseguir un establecimiento en el área de Las Palmas, 5 y 10 y alrededores de la avenida Aguacaliente, ya que la mayoría está ocupado.
Busca un local grande para acondicionarlo como bodega para acomodar la mercancía de una cafetería y habilitar oficinas, pero también encuentra rentas muy caras.
“Necesitamos algo céntrico por la ubicación de las cafeterías, aproximadamente los precios están por arriba de los dos mil dólares”, señaló.
Rentas en dólar
La líder de la asociación de inmobiliarios confirmó que existe un incremento en el costo de las rentas de espacios comerciales, desde los más pequeños para venta de bebidas no alcohólicas, hasta los más grandes que son destinados para consultorios médicos.
Destacó que este año los propietarios de establecimientos comenzaron a cobrar en moneda nacional ante la baja en el precio del dólar, ya que actualmente ronda los 17 pesos por uno, comparado con el año anterior cuando cada billete verde costaba 18.00 pesos.
“Los propietarios no quieren rentar ya en dólares, están empezando a rentar en pesos, cuando Tijuana siempre ha sido una ciudad que está dolarizada”, apuntó.
Señaló que el costo de renta de un local depende de sus dimensiones, su ubicación y el tipo de negocio que desean habilitar, ya que algunos propietarios no aceptan cualquier giro.
Detalló que un local de treinta metros cuadrados puede costar 600 dólares y un piso completo con diez oficinas ronda los 6 mil quinientos dólares.
