/ lunes 7 de septiembre de 2020

Esta semana en futbol de San Diego | La USL necesita el VAR para la próxima temporada

Al tener la oportunidad de trabajar en la Premier Development League y el sistema USL2 durante cuatro años con San Diego Zest FC, pude presenciar en persona el alto nivel de calidad que estos desarrollaron en sus jugadores, entrenadores e instalaciones. Lamentablemente, lo único que falta, aparentemente, es desarrollar la calidad de su arbitraje.

Al igual que con los jugadores, ya sea que estos compitan a nivel amateur o en los rangos más altos del futbol profesional, nadie espera tener un juego perfecto en cada partido. Sin embargo, se debe tener un cierto nivel de consistencia y mejoramiento entre aquellos que pueden alterar el destino para los equipos no solo en términos del resultado de un partido, sino también de sus perspectivas de llegar a la postemporada, y con ello me refiero a los árbitros.

Tomemos a San Diego Loyal como ejemplo. En lo que va de la temporada, los arbitros han tenido al menos cuatro jugadas que tuvieron un impacto directo en el resultado final; tres fueron en contra.

La primera, el 11 de julio en partido ante los campeones reinantes de la USL Championship, Real Salt Lake, en un tiro que rebotó en el travesaño y cruzó claramente la línea, pero no fue declarado gol, permitiendo que a San Diego Loyal se le escaparan los tres puntos con una victoria de 1-0.

El siguiente fue el 15 de agosto contra el líder del Grupo B, Phoenix Rising, cuando San Diego Loyal fue silvado por interferencia con el portero que anuló un gol que habría reducido su déficit de dos goles en ese momento, con 30 minutos para buscar el empate.

El siguiente se produjo el 29 de agosto en la última jugada del partido; no se sancionó un claro penal cometido por la mano de un defensor de Orange County SC, uno de los equipos que actualmente están peleando en la tabla del Grupo B, lo que le habría dado a San Diego Loyal la oportunidad de salir con tres puntos en vez de uno.

Y el más reciente ocurrió la semana pasada contra Las Vegas Lights, cuando no se marcó un fuera de lugar al final del juego, lo que se convirtió en un gol y dejó el marcador final en empate en vez de otra victoria para los de los sandieguinos.

No estoy señalando que la liga tiene algo en contra del equipo bajo el mando de Landon Donovan, ya que este tipo de decisiones erróneas también le han sucedido a otros equipos. Tambien sé que incluso con el VAR no hay garantía de que estas decisiones hubieran sido revertidas, pero al menos los árbitros de esta liga deberían tener la oportunidad de corregir un error que podría costarle a un equipo que ha luchado por varios meses la oportunidad de celebrar su arduo esfuerzo al final de la temporada.

Con la pandemia de Covid-19 aún en marcha en el mundo y millones de personas infectadas hasta ahora, entiendo el razonamiento detrás de por qué la liga no quería prolongar los partidos esta temporada y aumentar el riesgo de exposición a los jugadores.

Sin embargo, si se puede encontrar una cura para fin de año o principios de 2021, entonces la USL Championship debería seguir el ejemplo de otras ligas de Segunda División e instituir en este avance tecnológico tan necesario.

Los propietarios tendrán una gran influencia en esto cuando se acabe la temporada y si son suficientes los que apoyan esta idea de instituir el VAR, los árbitros no solo tendrán menos presión sobre ellos para ser perfectos, sino que los resultados de los partidos tambien serán más justos.

Al tener la oportunidad de trabajar en la Premier Development League y el sistema USL2 durante cuatro años con San Diego Zest FC, pude presenciar en persona el alto nivel de calidad que estos desarrollaron en sus jugadores, entrenadores e instalaciones. Lamentablemente, lo único que falta, aparentemente, es desarrollar la calidad de su arbitraje.

Al igual que con los jugadores, ya sea que estos compitan a nivel amateur o en los rangos más altos del futbol profesional, nadie espera tener un juego perfecto en cada partido. Sin embargo, se debe tener un cierto nivel de consistencia y mejoramiento entre aquellos que pueden alterar el destino para los equipos no solo en términos del resultado de un partido, sino también de sus perspectivas de llegar a la postemporada, y con ello me refiero a los árbitros.

Tomemos a San Diego Loyal como ejemplo. En lo que va de la temporada, los arbitros han tenido al menos cuatro jugadas que tuvieron un impacto directo en el resultado final; tres fueron en contra.

La primera, el 11 de julio en partido ante los campeones reinantes de la USL Championship, Real Salt Lake, en un tiro que rebotó en el travesaño y cruzó claramente la línea, pero no fue declarado gol, permitiendo que a San Diego Loyal se le escaparan los tres puntos con una victoria de 1-0.

El siguiente fue el 15 de agosto contra el líder del Grupo B, Phoenix Rising, cuando San Diego Loyal fue silvado por interferencia con el portero que anuló un gol que habría reducido su déficit de dos goles en ese momento, con 30 minutos para buscar el empate.

El siguiente se produjo el 29 de agosto en la última jugada del partido; no se sancionó un claro penal cometido por la mano de un defensor de Orange County SC, uno de los equipos que actualmente están peleando en la tabla del Grupo B, lo que le habría dado a San Diego Loyal la oportunidad de salir con tres puntos en vez de uno.

Y el más reciente ocurrió la semana pasada contra Las Vegas Lights, cuando no se marcó un fuera de lugar al final del juego, lo que se convirtió en un gol y dejó el marcador final en empate en vez de otra victoria para los de los sandieguinos.

No estoy señalando que la liga tiene algo en contra del equipo bajo el mando de Landon Donovan, ya que este tipo de decisiones erróneas también le han sucedido a otros equipos. Tambien sé que incluso con el VAR no hay garantía de que estas decisiones hubieran sido revertidas, pero al menos los árbitros de esta liga deberían tener la oportunidad de corregir un error que podría costarle a un equipo que ha luchado por varios meses la oportunidad de celebrar su arduo esfuerzo al final de la temporada.

Con la pandemia de Covid-19 aún en marcha en el mundo y millones de personas infectadas hasta ahora, entiendo el razonamiento detrás de por qué la liga no quería prolongar los partidos esta temporada y aumentar el riesgo de exposición a los jugadores.

Sin embargo, si se puede encontrar una cura para fin de año o principios de 2021, entonces la USL Championship debería seguir el ejemplo de otras ligas de Segunda División e instituir en este avance tecnológico tan necesario.

Los propietarios tendrán una gran influencia en esto cuando se acabe la temporada y si son suficientes los que apoyan esta idea de instituir el VAR, los árbitros no solo tendrán menos presión sobre ellos para ser perfectos, sino que los resultados de los partidos tambien serán más justos.