/ miércoles 13 de marzo de 2024

Expediente Confidencial / El Papa diabólico

El impresentable llamado Jorge Mario Bergoglio, impuesto hace 11 años como Papa por los mismos creadores de Obama, Petro, Ocasio y tantos otros, volvió a ponerse del lado que le fascina, el del mal, para, ahora, pedirle a Ucrania que ya, de plano, se rinda ante Putin.

No es la primera vez que Francisco, a quien le viene muy guango el título de Papa, muestra su amor por los dictadores y criminales, como el enfermo fanático "progresista" que es: en 2021, corrió a manifestantes cubanos de la Plaza de San Pedro, por protestar contra la dictadura que mal gobierna su país, mientras Bergoglio se reunía con Miguel Díaz Canel, prestanombres de los Castro, eternos dictadores en la antilla.

Pero ¿Qué dijo Francisco esta vez?

En una entrevista con Radio Télévision Suisse (RTS), Francisco le dijo a ucranias y ucranios que "la palabra negociar es una palabra valiente. Cuando ves que estás derrotado, que las cosas no van bien, tienes que tener el coraje de izar la bandera blanca y negociar (...) creo que son más fuertes quienes ven la situación, quienes piensan en el pueblo, quienes tienen el coraje de izar la bandera blanca y negociar (...) hoy, por ejemplo, en la guerra de Ucrania, hay muchos que quieren actuar como mediadores. Turquía se ofreció a ello. Y otros. No tengan vergüenza de negociar antes de que las cosas empeoren...".

La respuesta a semejante estiércol verbal no se hizo esperar. Dos fueron las mejores:

"¿Qué tal, para equilibrar, animar a Putin a tener el coraje de retirar su ejército de Ucrania?", expresó el ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Radosław Sikorski, en una publicación en X, quien, además, le recordó un pequeño 'detalle' a Francisco: si Putin desiste de su invasión, "la paz sobrevendría inmediatamente, sin necesidad de negociaciones".

"No hay que capitular ante el mal, hay que combatirlo y derrotarlo, para que el mal levante la bandera blanca y capitule", dijo, por su parte, el presidente de Letonia, Edgars Rinkēvičs, también en X.

Igualmente, las autoridades ucranianas dieron certera respuesta: "Nuestra bandera es amarilla y azul. Esta es la bandera por la que vivimos, moriremos y triunfaremos. Nunca levantaremos otras banderas", dijo el ministro de Relaciones Exteriores ucraniano, Dmitro Kuleba, vía X, quien añadió: "El más fuerte es el que, en la batalla entre el bien y el mal, se sitúa del lado del bien, en lugar de intentar ponerlos en el mismo plano y llamarlo 'negociaciones'".

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, dio una elegante respuesta, al agradecer a los clérigos que han ido a la zona de guerra, para estar con el pueblo ucraniano y, de pasada, dar inmejorable revire: "Esto es la Iglesia: estar junto al pueblo, no a 2500 kilómetros, en algún lugar, para mediar virtualmente entre alguien que quiere vivir y alguien que quiere destruirte".

¿Por qué Bergoglio dijo eso? Fácil. El tipo es ultra del "progresismo" y, por ende, del kirchnerismo de su país, Argentina. Y ese kirchnerismo es aliado de Putin.

Además, a Bergoglio, fanático como es, debió caerle en la punta del hígado que Zelenski fuese a la toma de posesión de Javier Milei, en diciembre, pues este último derroto a su amado "progresismo" kirchenrista, el cual, por lo demás, de tan "progresista", llevó a 40% de argentinas y argentinos a la pobreza.

Por otro lado, lo dicho y hecho por Bergoglio se encuadra dentro de su discurso habitual de defensor de la maldad, el crimen y las dictaduras, consustancial a todo "progresista" fanático. Así como ahora defendió a Putin, también ha defendido al grupo terrorista Hamas. Fíjense nada más: el dizque jerarca de la religión católica, defendiendo a mercenarios, como los de Wagner, o terroristas, como los palestinos de Hamas, que van y violan mujeres inocentes, que asesinan, incluso niñas y niños, que destruyen a personas que no tienen ninguna culpa.

Y, por supuesto, como "progresista" de rigor, Francisco utiliza a las minorías como bandera y, cuando le estorban, las olvida. Dizque muy comprensivo con la comunidad LGBTQI+ ¡Y mírenlo nada más, defendiendo a un tipejo como Putin, que proscribe y persigue a sus miembros y los encarcela!

Que nadie se vaya con la finta de que si Bergoglio es fanático, lo es por convicción. No hay que olvidar que Putin tiene muchísimo dinero para comprar aliados. Igual que los terroristas de Hamas con el dinero del petróleo árabe. Igual que la dictadura china con el dinero proveniente del lavado de dinero, el fentanilo y otras drogas. Bergoglio es solamente otro sicario propagandístico más, al servicio de sus patrones.

Y tampoco nos confundamos. Lo dicho por Bergoglio a las ucranias y los ucranios, es lo mismo que ese "progresismo" de WC nos quiere meter a tod@s en la cabeza, según los enemigos de cada quien: "los malos -llámese narcos, terroristas, tratantes, 'polleros' o dictadores- ya ganaron. Ríndanse y déjense destruir por ellos". Pues no. Eso jamás. Es falso que vayan ganando. Tan van perdiendo, que necesitan tretas para convencernos. Y rendirnos no es opción...

SINVERGÜENZAS DE BLANCO: En el México de hoy ya no hay límites para el cinismo. La manifestación de enfermeros del IMSS, registrada el lunes en Tijuana, es la última muestra ¡Se les murió una paciente por dejarle una gasa dentro! ¡¡Y todavía dicen que el despido de sus "compañeros" es injustificado!! Tantita madre, por favor

Comentarios: gerardofm2020@gmail.com

El impresentable llamado Jorge Mario Bergoglio, impuesto hace 11 años como Papa por los mismos creadores de Obama, Petro, Ocasio y tantos otros, volvió a ponerse del lado que le fascina, el del mal, para, ahora, pedirle a Ucrania que ya, de plano, se rinda ante Putin.

No es la primera vez que Francisco, a quien le viene muy guango el título de Papa, muestra su amor por los dictadores y criminales, como el enfermo fanático "progresista" que es: en 2021, corrió a manifestantes cubanos de la Plaza de San Pedro, por protestar contra la dictadura que mal gobierna su país, mientras Bergoglio se reunía con Miguel Díaz Canel, prestanombres de los Castro, eternos dictadores en la antilla.

Pero ¿Qué dijo Francisco esta vez?

En una entrevista con Radio Télévision Suisse (RTS), Francisco le dijo a ucranias y ucranios que "la palabra negociar es una palabra valiente. Cuando ves que estás derrotado, que las cosas no van bien, tienes que tener el coraje de izar la bandera blanca y negociar (...) creo que son más fuertes quienes ven la situación, quienes piensan en el pueblo, quienes tienen el coraje de izar la bandera blanca y negociar (...) hoy, por ejemplo, en la guerra de Ucrania, hay muchos que quieren actuar como mediadores. Turquía se ofreció a ello. Y otros. No tengan vergüenza de negociar antes de que las cosas empeoren...".

La respuesta a semejante estiércol verbal no se hizo esperar. Dos fueron las mejores:

"¿Qué tal, para equilibrar, animar a Putin a tener el coraje de retirar su ejército de Ucrania?", expresó el ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Radosław Sikorski, en una publicación en X, quien, además, le recordó un pequeño 'detalle' a Francisco: si Putin desiste de su invasión, "la paz sobrevendría inmediatamente, sin necesidad de negociaciones".

"No hay que capitular ante el mal, hay que combatirlo y derrotarlo, para que el mal levante la bandera blanca y capitule", dijo, por su parte, el presidente de Letonia, Edgars Rinkēvičs, también en X.

Igualmente, las autoridades ucranianas dieron certera respuesta: "Nuestra bandera es amarilla y azul. Esta es la bandera por la que vivimos, moriremos y triunfaremos. Nunca levantaremos otras banderas", dijo el ministro de Relaciones Exteriores ucraniano, Dmitro Kuleba, vía X, quien añadió: "El más fuerte es el que, en la batalla entre el bien y el mal, se sitúa del lado del bien, en lugar de intentar ponerlos en el mismo plano y llamarlo 'negociaciones'".

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, dio una elegante respuesta, al agradecer a los clérigos que han ido a la zona de guerra, para estar con el pueblo ucraniano y, de pasada, dar inmejorable revire: "Esto es la Iglesia: estar junto al pueblo, no a 2500 kilómetros, en algún lugar, para mediar virtualmente entre alguien que quiere vivir y alguien que quiere destruirte".

¿Por qué Bergoglio dijo eso? Fácil. El tipo es ultra del "progresismo" y, por ende, del kirchnerismo de su país, Argentina. Y ese kirchnerismo es aliado de Putin.

Además, a Bergoglio, fanático como es, debió caerle en la punta del hígado que Zelenski fuese a la toma de posesión de Javier Milei, en diciembre, pues este último derroto a su amado "progresismo" kirchenrista, el cual, por lo demás, de tan "progresista", llevó a 40% de argentinas y argentinos a la pobreza.

Por otro lado, lo dicho y hecho por Bergoglio se encuadra dentro de su discurso habitual de defensor de la maldad, el crimen y las dictaduras, consustancial a todo "progresista" fanático. Así como ahora defendió a Putin, también ha defendido al grupo terrorista Hamas. Fíjense nada más: el dizque jerarca de la religión católica, defendiendo a mercenarios, como los de Wagner, o terroristas, como los palestinos de Hamas, que van y violan mujeres inocentes, que asesinan, incluso niñas y niños, que destruyen a personas que no tienen ninguna culpa.

Y, por supuesto, como "progresista" de rigor, Francisco utiliza a las minorías como bandera y, cuando le estorban, las olvida. Dizque muy comprensivo con la comunidad LGBTQI+ ¡Y mírenlo nada más, defendiendo a un tipejo como Putin, que proscribe y persigue a sus miembros y los encarcela!

Que nadie se vaya con la finta de que si Bergoglio es fanático, lo es por convicción. No hay que olvidar que Putin tiene muchísimo dinero para comprar aliados. Igual que los terroristas de Hamas con el dinero del petróleo árabe. Igual que la dictadura china con el dinero proveniente del lavado de dinero, el fentanilo y otras drogas. Bergoglio es solamente otro sicario propagandístico más, al servicio de sus patrones.

Y tampoco nos confundamos. Lo dicho por Bergoglio a las ucranias y los ucranios, es lo mismo que ese "progresismo" de WC nos quiere meter a tod@s en la cabeza, según los enemigos de cada quien: "los malos -llámese narcos, terroristas, tratantes, 'polleros' o dictadores- ya ganaron. Ríndanse y déjense destruir por ellos". Pues no. Eso jamás. Es falso que vayan ganando. Tan van perdiendo, que necesitan tretas para convencernos. Y rendirnos no es opción...

SINVERGÜENZAS DE BLANCO: En el México de hoy ya no hay límites para el cinismo. La manifestación de enfermeros del IMSS, registrada el lunes en Tijuana, es la última muestra ¡Se les murió una paciente por dejarle una gasa dentro! ¡¡Y todavía dicen que el despido de sus "compañeros" es injustificado!! Tantita madre, por favor

Comentarios: gerardofm2020@gmail.com